"Esperé mucho tiempo esta oportunidad"

Santiago Rosales tuvo su debut casi perfecto en Aldosivi. Figura, asistió en el primer gol, generó un penal y un expulsado. Su palabra, y una opinión sobre su rendimiento y futuro inmediato.

La gambeta de Santiago Rosales, el sábado ante Guaraní A. Franco (Foto: Diego Berrutti)-

20 de Octubre de 2014 13:24

Durante estos casi 10 años de Aldosivi en la Primera B Nacional, muchos fueron los jugadores juveniles que han debutado en el primer equipo. Pero con seguridad se puede afirmar que ninguno fue tan importante y determinante como lo fue Santiago Rosales el último sábado, el el triunfo del elenco de Mar del Plata ante Guaraní Antonio Franco por 2 a 0, en un José María Minella que despidió al "pibe" con las palmas rojas de tanto aplaudir.

El joven del barrio Libertad, que en la semana ante 0223 contó su historia en la cual hace 2 años había dejado el fútbol para trabajar como albañil junto a su tío, fue titular y no defraudó. Ya en los primeros 5 minutos generó tres remates al arco, apenas desviados. Con frescura, un buen control de pelota para saber utilizar los tiempos, supo cuándo "pisar el acelerador" y cuándo hacer la pausa. Cuando encaró, fue indetenible para los defensores misioneros: así hizo en el primer gol convertido por Lugüercio, al cual asistió tras ir hasta la raya de fondo. Cuando gambeteó, por ejemplo, generó el penal que luego falló Miracco. Y también se dio tiempo para algunos lujos: un "taco" para alargar la subida de Franco Canever, y una "pisadita" sobre el lateral que provocó la fuerte patada del defensor Sagarzazú, que todavía sueña con él.

"Todos los chicos me hablaron me aconsejaron, me pidieron tranquilidad pero yo también me siento cuplable de este momento, así que estoy seguro que vamos a salir adelante. Me pone contento el triunfo", declaró tras el partido, muy tímido, sintiéndose raro ante la maraña de micrófonos, celulares y cámaras. Santiago Rosales evitó hacer referencias sobre su rendimiento, intentó siempre poner al equipo en primer lugar. Aunque apenas expresó sobre él: "No sé si fue el debut soñado, pero esperé esta oportunidad hace mucho tiempo." El chico de pasado en Cadetes de San Martín se refirió a sus chances de gol: "En inferiores siempre me gustó pegarle al arco. Algunas me salieron mal pero trataba de acomodarme y pegarle. No salieron bien pero lo intenté. El técnico me pidió que desborde y tire centros, que me meta para adentro, que encare, también que patée", sostuvo.

Rosales no se olvidó de los agradecimientos: "a mis compañeros, y a los hinchas por el apoyo que me dieron en la semana. Por suerte pudimos ganar". Sobre el partido, añadió: "No pudimos aprovechar para hacer más goles cuando ellos tuvieron expulsados, pero les tocamos la pelota para que no nos conviertan". Y sobre el futuro, cerró: "Mientras pueda jugar, que lo decidirá el técnico, intentaré dar lo mejor".

Desparpajo, personalidad (tiene 19 años, pero jugó como si tuviera varios en primera), talento, gambeta, pegada, inteligencia. Santiago Rosales tuvo un gran partido cuando Aldosivi más necesitaba del triunfo. De alguna manera, el equipo tiene un nuevo refuerzo, ya sea para pelearle el puesto a Carranza o para ser una muy buena alternativa en el complemento. 

Quedará ahora en el club Aldosivi, cuidarlo. Seguir ayudando a su crecimiento. A que el juvenil mantenga la cabeza fresca, sin mareos. También estar atentos a aquellos empresarios que rápidamente aparecen cuando un chico se convierte en factible máquina de facturar en el futuro.... Rosales es una buena noticia para el fútbol de Mar del Plata. Que su crecimiento no se detenga.