Enero: playa, sol, rayos y mucha lluvia

La bandera se estrenó en enero.

31 de Diciembre de 2014 00:19

Por Redacción 0223

PARA 0223

Enero es sinónimo de vacaciones, sol y playa para millones de turistas que visitan la costa de Mar del Plata y sus alrededores. Sin embargo, el primer mes del 2014 trajo de todo: tormentas, calles inundadas y la aparición de rayos, cuyo impacto provocó muertos y heridos.

Primero avisó en Villa Gesell, donde el fenómeno meteorológico se llevó la vida de 5 jóvenes turistas que disfrutaban de la playa. Y cuando aún persistía el asombro, el cambio climático daba nuevos golpes: dos rayos impactaban en los balnearios marplatenses de Alfar y Waikiki y a los días la historia se repetía en la costa gesellina, aunque en ambas ocasiones, sin víctimas fatales.

Ante esta inédita situación, la Provincia, tratando de tener la situación “bajo control”, aconsejó a los propietarios de los balnearios a instalar pararrayos en las inmediaciones a los complejos recreativos. Normativa  que luego sería rechazada por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti), que a través de un comunicado de prensa desalentaba esta práctica ya que aseguraba, “traería peores consecuencias” que bienestar a los turistas.

Finalmente y puesta la mirada en la temporada 2015, bajó recientemente desde La Plata la solución que encontró la Provincia: “detectores de tormenta” o dispositivos que alertarán sobre la presencia de estos extraños y peligrosos fenómenos. Eso, sumado a la bandera negra, será en principio lo que permitirá a todos los bañistas, disfrutar de la playa sin pasar mayores sobresaltos. Pero a tener precaución: si está en la playa o algún lugar descampado y ve nubes  muy negras, vaya enfilando para el auto, porque "el que avisa no traiciona".

Llueve sobre mojado

Pero si la consecuencia de los rayos era impensada, distinta es la situación de las fuertes precipitaciones, que cada vez que se abaten sobre la ciudad, encuentran las mismas postales venecianas y los mismos barrios: Termas Huinco, Puerto, Los Pinares, San Carlos, Florencio Sánchez, El Progreso, Autódromo, Parque Hermoso, Chauvín y otros tantos puntos de Mar del Plata que son víctimas del cambio climático o de la falta de gestión de las distintos gobiernos municipales, todo según el color del cristal con que se mire.  

Aquel 21 de enero cayeron 138 milímetros en apenas unas horas, situación que provocó el anegamiento de distintas zonas de la ciudad y que desnudó además a través de los meses las graves falencias edilicias que tienen nuestras escuelas, que provocaron varios días sin clases y alguna que otra desinteligencia del Municipio a la hora de atender a los evacuados.

En resumen, el renombrado “cambio climático” vino para quedarse y las autoridades tendrán que estar más atentas y tomar los recaudos necesarios para que el mal tiempo no genere mas muerte y tragedia.