Allanaron la CABB, pero Zanni no se va

El escándalo en el básquet nacional continúa y la Inspección General de Justicia se presentó en la sede para llevar a cabo el procedimiento. Un rato después, el presidente confirmó que sigue.

Zanni se va de la conferencia, pero no de la CABB. El presidente sorprendió a todos y aseguró su continuidad.

28 de Julio de 2014 16:47

Por Redacción 0223

PARA 0223

A poco más de un mes del Mundial de España 2014, se habla más de lo que pasa fuera del rectángulo de juego, que de la preparación de la Selección Argentina que irá a buscar seguir como una de las potencias del básquet mundial. La “guerra” declarada entre la dirigencia y los jugadores no se detiene, este lunes la IGJ allanó las oficinas de la Confederación Argentina y cuando se esperaba que el actual presidente Daniel Zanni anuncie su renuncia en una conferencia de prensa, negó esa posibilidad y aseguró que va a seguir en el cargo.
 
Los principales referentes de la "Generación Dorada", entre ellos el capitán Luis Scola y el escolta Emanuel Ginóbili, denunciaron a la dirigencia del básquetbol argentino por desmanejos que llevaron a la confederación a una severa crisis económica, financiera e institucional en los últimos años. Además, exigieron la realización de una auditoría para conocer el estado de las cuentas de la entidad, cuya deuda fue estimada en un monto superior a los 20 millones de pesos. Por eso, la Inspección General de Justicia se hizo presente en la sede para realizar un allanamiento.
 
El incumplimiento alcanza a los empleados de la institución, a los jugadores del seleccionado y puso en riesgo la participación del equipo en el próximo Mundial España 2014 por el atraso en el pago de los seguros de las figuras que actúan en la NBA
 
Un rato más tarde, en la conferencia pactada por el presidente Daniel Zanni, todos esperaban que presente su renuncia y que atrás de él se fuera el resto de la Comisión Directiva, llamando a elecciones próximamente. Lejos de eso, el actual titular de la CABB se mostró firme y aseguró que "nunca hablé de renuncia. Lo hice de dolor y humillación. Seguiré en el cargo porque tengo el respaldo de mis pares. Debemos conversar y dialogar con los jugadores".
 
"Ellos me conocen, tienen que trabajar tranquilos, voy a hacer todo lo necesario para que las cosas se den como se tienen que darse", afirmó el dirigente. El fuego no se detiene, habrá que ver si los jugadores están conformes con esta decisión y si de una vez por toda podrán poner la cabeza en lo deportivo, o tendrán que seguir pensando en lo que suceda afuera, con una dirigencia que deja mucho que desear desde hace un buen tiempo a esta parte.