Patético, triste y final

En los últimos días llegó a los domicilios de los afiliados a la UCR una carta encabezada por una frase de Raúl Alfonsín, está visto que cuando no se tiene razón o se es un vil instrumento del régimen se hecha a mano a cualquier frase y así justificar las peores de las conductas para un radical, como es la deslealtad, la traición, la permuta, la transa, el desagradecimiento, la deserción y sobre todo una conducta antidemocrática, que hace nada más que poner de manifiesto que se trata de un herramienta de aquellos que arrasan con todos los sueños de los que queremos una ciudad mejor.

Y ponemos hincapié en todos esos adjetivos grotescos por que se nos está golpeando en donde más nos duele, en nuestro concepto de Democracia, en nuestra concepción de hombres de bien, porque, primero somos respetuosos de las decisiones de nuestros cuerpos orgánicos. Somos los únicos, los Radicales, que juntamos una Convención Nacional que decidió las políticas de alianzas que fue refrendada por la Provincial y después por el propio Comité de Distrito donde no se escuchó la voz de estos “correligionarios” oponiéndose a que lo integráramos en nuestro distrito.

Y segundo participamos en una Interna Abierta simultánea y obligatoria y perdimos. Y como somos buena gente, no desertamos del desafío y nos encolumnamos detrás del triunfador, que lo decidió la gente con su voto. Nosotros somos Radicales, somos democráticos y no vamos a permitir que gente con un nombre y una posición construida desde el radicalismo, pero que hace años que desertaron, hoy nos vengan a decir si tal o cual candidato es quien nos representa.

Los Radicales de buena fe y con hombría de bien, si tenemos candidato, no mienta más señor Pulti, ya resulta patético, esto no es fruto de ningún acuerdo partidario, es el resultado de una elección, perdimos y nos toca acompañar, es muy triste utilizar a gente para hacer una maniobra más de la peor calaña y que nos tiene como víctimas de su falta total de escrúpulos, ambición desmedida y de su pánico a que le revisen las cuentas y termine en Batán pero del lado de adentro, lo único que busca Sr. Intendente es retrasar un final de un ciclo que ya está agotado y la ciudad busca cambiar.