En 2 años hubo 165 homicidios en Mar del Plata, 20 fueron en ocasión de robo

El aumento de los hechos violentos en General Pueyrredon es un hecho incontrastable que nadie puede negar. Sin embargo, un informe sobre los homicidios dolosos en la ciudad entre 2013 y 2014 del Centro Municipal de Análisis Estratégico (Cemaed) sirve para trazar un panorama más claro de las causas por las que se produce la violencia.

Según los datos del centro que comanda Tobías Schleider en esos dos años se produjeron 165 homicidios dolosos en Mar del Plata (89 en 2013 y 76 en 2014), es decir que hubo casi un asesinato cada 4 días. No obstante, de la cifra total solo 20 fueron cometidos en ocasión de robo (16 en 2013 y 4 en 2014).

“Las cifras comparadas entre los dos años muestran una baja en la cantidad de casos en 2014, pero un ascenso en el número de hechos cuyo origen fue un conflicto personal, vecinal o una situación de violencia familiar”, advierten los especialistas en las conclusiones. 

Los datos que aporta el informe abordan diversos indicadores: lugar donde fueron cometidos los crímenes, edades de las víctimas, motivaciones del hecho y zonas de la ciudad en donde se produjeron. Y en esas precisiones surgen detalles que vale la pena analizar.

Por caso, la ubicación geográfica de los homicidios también da un parámetro importante de la situación. Para el informe, los especialistas resolvieron dividir Mar del Plata en tres zonas. La primera la denominaron Alfonsina e incluye el micro y macrocentro marplatense. La segunda es Peralta Ramos, que abarca sectores intermedios y más alejados. Y la tercera es el área Camet, que abarca el anillo más periférico de Mar del Plata. Por último, los sectores fuera del casco urbano (rurales, Batán, Laguna y Sierra de los Padres) se consideran áreas de patrullaje específico.

De los 165 asesinatos en esos dos años, 8 fueron en la zona céntrica (7 en 2013 y solo 1 en 2014). “Hay una traslación evidente de los hechos de homicidio doloso hacia el sector más externo del territorio urbano, que podría vincularse al crecimiento de niveles de conflictividad social y de violencia en sectores determinados del Partido”, señalan las conclusiones del informe.

Esta tendencia se mantiene en 2015. Tras la seguidilla de homicidios que hubo en la ciudad, 0223 publicó un informe en el que se detallaba la zona en la que se cometieron los crímenes y las circunstancias. Allí se adviertía que ningún hecho se produjo en la zona céntrica  y que en su mayoría los homicidios estaban motivados en conflictos personales. 

A su vez, los datos revelan que del total de homicidios dolosos, 118 fueron por motivos personales (peleas de vieja data o vecinales o hechos de violencia familiar). Y también hacen hincapié en el uso de armas de fuego en 119 de los 165. “Vuelve a poner el alerta sobre la vinculación de este tipo de armas y la resolución de conflictos por fuera de los mecanismos que el Estado prevé”, indica.

En cuanto a las edades de las víctimas, el informe refleja que el 50% de los ocurridos en 2013 tenían entre 16 y 35 años. En 2014, el 47% de las víctimas perteneció a la misma franja etaria. En los dos años, el 29% de las víctimas tenía entre 36 y 50 años. Entre los porcentajes menores, se encuentran las víctimas de 66 años en adelante o de menos de 15.

“Un dato destacable es la relación de la edad de las víctimas y los motivos del homicidio. En los casos de homicidios en ocasión de robo, más de la mitad de las víctimas tenían más de 50 años. En los casos de homicidios por intervención de las fuerzas de seguridad, la mayor parte de las víctimas tenían menos de 35 años”, añade.