“El peronismo se debe la discusión sobre el Poder, no sobre el Gobierno”

Si Guillermo Moreno fuese de esos hombres que reservan la mesita de luz para sus cosas importantes, sin duda que sobre ella tendría que haber una foto de Perón y una estampita de Francisco. Es que entre los postulados de uno y otro, el exsecretario de Comercio Interior apoya su cosmovisión política. Cuando tiene que explicar por qué el Gobierno de Mauricio Macri es “brutal y oligarca”, cita al General. Cuando tiene que contar por qué piensa que el mundo atraviesa la tercera guerra mundial, nombra al Papa. Así, sucesivamente, durante gran parte de la conferencia de prensa que ofreció este viernes en Mar del Plata para anticipar el lanzamiento de una campaña nacional de afiliación al Partido Justicialista.

Sin embargo, para explicar cómo fue posible que Macri desarmara tanto en tan poco, Moreno no trajo a colación ni a uno ni a otro. Para contentar a esa pregunta que tanto inquieta a propios y ajenos a la estructura kirchnerista, el dirigente mencionó a los “poderes concentrados” y deslizó, aunque sin profundizar, una autocrítica en torno a la diferencia de gobernar y tener poder.

“El peronismo, no hay ninguna duda, entiende claramente la disputa de Gobierno. Lo que nos debemos es la discusión sobre el poder, que no necesariamente es la capacidad que tenés de tomar decisiones desde el Gobierno, sino la capacidad de tomar decisiones como modelo de país y que te hagan caso. Finalmente, el poder es eso: la capacidad que tiene una estructura de tomar decisiones y que el resto acompañe. Es la diferencia entre mandar y persuadir. Por eso que es el Poder lo que nosotros nos debemos”, consideró Moreno ante una consulta de 0223.

Sin ánimos de ir más allá con la autocrítica, el exfuncionario nacional giró los tanques y apuntó contra los que “se siguen juntando en la mesa y decidiendo desde lo empresarial”. Para Moreno, esos son los “poderes concentrados” que disputan poder real.

“Cuando nosotros llegamos al Gobierno, si objetivamos el poder y le ponemos nombre y apellido, podemos decir que era Magnetto, Roca, Britos y Blaquier. No hay mucho más en término de poder de los que se juntan en la mesa y deciden empresarialmente. Cuando nosotros nos fuimos del Gobierno, vimos que siguen estando, que siguen haciendo lo mismo, un poquito más, un poquito menos, pero ahí están. Por eso que tenemos que dar la discusión interna y hacia fuera sobre el poder, porque si no confundimos la posibilidad de administrar el Gobierno con lo profundo de la sociedad argentina. A veces esa discusión no sale a la superficie porque los de ese preciso poder quieren evitarla. Entonces te hacen creer que desde el Gobierno tenés el poder, cuando eso no es necesariamente así”, señaló y se dio pase a cuestionar a Macri y su supuesta permeabilidad para que esos “poderes concentrados intervengan el Estado”.

“Es que las transformaciones que por ahora estamos viendo en este Gobierno tiene que ver con eso. Muchas de las decisiones del actual oficialismo no salen de su cartera de cuadros técnicos. Y eso lo demuestra, por ejemplo, lo que hicieron con la ley de medios, que es de una complejidad enorme. La sensación que da es que le le dijeron “firmá acá” y punto. El poder se objetivó en un decreto de necesidad y urgencia. Fui secretario de comunicación y sé lo dificultoso que es armar una legislación en un área así. Y todos sabemos que a los 20 días de haber asumido, ellos claramente no tenían cuadro para hacer algo así”, razonó Moreno.

Próxima estación, peronismo 

Durante una entrevista que dio a radio Del Plata, Guillermo Moreno le puso nombre a este período político. Para el exsecretario de Comercio Interior, la sociedad argentina atraviesa una etapa “preperonista”, que en relación al presente se explica en que “tenemos un Gobierno oligarca”, y que en proyección a futuro, se entiende como una carrera hacia “otra década ganada”.

En este marco, tomando por ejemplo el organigrama de la peregrinación a la Basílica de Luján, Moreno explicó las “paradas” que a su entender tendrá que hacer el peronismo para volver a la Presidencia en cuatro años.

“La primera parada es la afiliación y la segunda es la interna. Luego discutiremos lo importante, porque ahora estamos discutiendo lo urgente. Pero para eso tendremos que tomar otra reflexión de su Santidad, que dice que el mundo está en la tercera guerra mundial. A partir de eso tendremos que discutir los instrumentos de este modelo nacional y popular en ese contexto mundial”.

Hechos esos dos “stop”, la peregrinación hasta la Rosada continuará, a entender de Moreno, con una tercera parada en las elecciones legislativas de 2017 y con la cuarta y última en la votación presidencial de 2019. “Todo esto previo a las internas donde vamos a elegir a los mejores hombres y mujeres, porque este gobierno oligarca tiene que ser un paréntesis entre dos las dos décadas ganadas”.