Círculo y Kimberley jugaron poco y metieron mucho

Con jugadores aptos para brindar un buen espectáculo, los dos representantes marplatenses se dedicaron más a meter y discutir, y aburrieron a todos con el 1 a 1 en Otamendi, que favoreció al "dragón" que jugó un tiempo con 10.

2 de Octubre de 2016 18:45

Se conocen tanto Círculo y Kimberley, se ha hablado tanto en la previa del Federal B que compartían zona, todos los condimentos por jugadores que iban a ir a un equipo y fueron a otro, porque Damián García dirigía al "dragón" y ahora está en el "papero", que a la hora de jugar, volvieron a quedar en deuda. Se preocuparon más por luchar que por generar, el local no supo aguantar la ventaja que consiguió y, con un hombre más por la expulsión de Rodríguez Rendón, no tuvo ideas para ir por el triunfo. Los de Mariano Mignini hicieron su negocio, sumaron un punto que sirve para mantener la punta y el invicto, y terminaron conformes con el 1 a 1. Pobre arbitraje de Marcelo Sanz.

Desde el arranque del partido, se notó que iba a ser friccionado, que no se iban a dejar espacios y que todas las pelotas se iban a jugar como si fueran la última. Encima, un campo que estaba resbaladizo, hacía que las jugadas sean más espectaclares y cada barrida fuera al límite. En la primera que salió lejos de su arco, Portillo barrió a Baigorria y Sanz lo arregló con una amarilla que lo terminó condicionando más adelante. De juego, poco y nada. Incluso la única situación clara en esos minutos iniciales, a los 12', se dio por una falla entre Ullúa y Cebada que se pelearon al querer despejar y la pelota le quedó servida a Enzo Vértiz que se fue cara a cara con Aldo Suárez, el arquero usó su experiencia y lo aguantó bien, le adivinó la intención al "Turbo" que lo quiso gambetear y alcanzó a amortiguar el remate que Fares terminó sacando casi sobre la línea.

El local era el que más quería, pero no encontraba precisión en los dos volantes centrales, mientras que Rodríguez Rendón solo se hacía dueño de la mitad de la cancha, en la recuperación y el primer pase. Como no podía ser de otra manera, la apertura del marcador llegó en una pelota parada. Cada córner era una batalla, el árbitro había advertido a defensores y atacantes, pero a los 21', Alejandro Portillo se escapó en el punto penal y metió un cabezazo letal, tras un centro de Beguiristain para poner el 1 a 0 para el "papero".

Sin embargo, la alegría le duró poco, porque cuatro minutos más tarde, Del Curto salió mal a buscar un centro que terminó pasando y, en su afán por despejar, Ferella terminó poniendo la mano, Sanz no dudó y sancionó el penal para que Kimberley dejara todo como al principio. El goleador Emanuel Pennisi se hizo cargo de la ejecución y no falló con un remate cruzado, lejos de la estirada del arquero que esperó hasta último momento. Empezaba de nuevo el partido y la pierna fuerte era una de las características, las discusiones entre los jugadores, las protestas al árbitro. De fútbol, muy poquito. Apenas una buena incursión de Lucas Enriquez por la derecha que terminó con un disparo cruzado, a media altura que fue bien resuelto por Del Curto.

La etapa se iba muy hablada, y en una misma jugada se descontroló. Porque Andrés Blanco se tiró mal contra Baigorria, Sanz dejó seguir y Rodríguez Rendón hizo "justicia por mano propia" con un duro planchazo sobre el lateral derecho. Todos los jugadores de los dos equipos se fueron encima del árbitro antes que tomara cualquier decisión, los calmó, y después mandó a las duchas a "Coco", hasta ahí el mejor de la cancha. Una expulsión que no sería protestable, de no ser por aquella de Portillo que midió con distinta vara.

Para el regreso del vestuario, Mariano Mignini no modificó nada, pero en apenas 4' se dio cuenta que no podía jugar sin volante de contención y mandó a Servera a la cancha. Porque intentó con Baigorria de "5", pero perdió referencia por las bandas y Círculo lo salió a atacar así, llegó Prado, cambió para Enzo Vértiz que llegó solo y la terminó mal. Entonces, el "Gato" reacomodó las piezas, sacó a Enriquez y se paró con un 4-3-2. Aún con un hombre menos, el "dragón" era más claro, jugaba con la desesperación de su rival y cuando recuperaba la pelota encontraba espacios. Casi estira la diferencia Ullúa de carambola, tras un centro de la derecha, y un par de contra ataques certeros fueron mal finalizados por Ullúa y Pennisi.

Damián García intentó darle más juego con Matías Faguaga y adelantó a Martín Prado para que Astiz no esté tan solo en el ataque. Y en la primera que tocó el exNación, recibió el pase cruzado de Vértiz, quiso eludir a Suárez pero la pelota se le fue demasiado larga y alcanzó a rechazar Erramuspe. El técnico "papero" agotó los cambios con el ingreso de un punta (Scoles) por un lateral (Ferella), Marcelo Vértiz retrocedió al lateral y Prado volvió a cambiar de posición para arrancar delante de Hidalgo. Sin embargo, el local no encontraba claridad y, con poco, Kimberley lo controlaba. Servera fue amo y señor del mediocampo, recuperó todo y cuando no pudo cortó para que su equipo se reagrupe. En una buena jugada colectiva, Ullúa tuvo el remate franco pero eligió frenar, desairó a Blanco y tocó atrás para Barreiro que terminó pateando al cuerpo de Cortés y la pelota se fue arriba del travesaño.

La última gran ocasión para los de Otamendi, fue una de las jugadas mejores gestadas de la tarde. Prado recibió como enganche y metió la estocada para Enzo Vértiz que arrancó habilitado, se metió en diagonal de derecha al centro, recibió, levantó la cabeza y buscó el pase bajo para Scoles y Astiz, pero se encontró con una buena respuesta de Suárez que se la jugó, adivinó la intención y salió antes para cortar lo que era el segundo para el dueño de casa.

En los 15' finales, Círculo quiso pero no pudo. Kimberley empezó a sentir el desgaste y firmó el empate, Patricio Rodríguez reemplazó a Pennisi y todos a trabajar para soportar los embates, sin claridad del "papero". Después, si alguna salida rápida por los costados podía darle una chance de llevarse los tres puntos, mucho mejor. 

No fue ni para uno ni para otro y el empate estuvo bien. Quedó la sensación de que podían haber jugado más y mejor. Pero adentro (y afuera) se vivió como un clásico y los clásicos son así, luchados, trabados, peleados, hablados. Sumaron un punto cada uno y siguen los dos muy bien parados, mejor Kimberley que continúa invicto y como único líder; no tan conforme Círculo Deportivo, que empató el tercer partido consecutivo y no logra fortalecerse en el "Guillermo Trama".