Círculo se aferra a la ilusión

No le sobró nada, pero a quién le importa. El triunfo de Sarmiento de Ayacucho sobre Kimberley a la mañana, lo había dejado a Círculo Deportivo con la obligación de derrotar a América de Pirán para mantener las aspiraciones de clasificar a la próxima fase. Y en la última pelota del partido, Leandro Parra tuvo su aparición goleadora para darle el 2 a 1 al equipo de Damián García que sigue expectante, a 3 puntos del "rojinegro" y 4 del "dragón", que tiene un partido más que sus perseguidores.

De entrada, Círculo se hizo cargo de sus necesidades y salió a tomar el protagonismo desde el primer minuto, pero le costó generar situaciones de gol. Sin embargo, América, un plantel lleno de nombres que nunca se terminó de consolidar como equipo, aprovechó su primera ocasión neta de gol y enmudeció el "Guillermo Trama" cuando Ricardo Sendra selló el 1 a 0 para la visita.

Todo cuesta arriba para el "papero" que confundió velocidad con apuro, no tuvo claridad y casi no llevó peligro al arco de Pablo Morata. Es más, América estuvo más cerca de irse al descanso con una ventaja mayor, con un remate que se perdió apenas al lado del palo de Del Curto, cuando transcurrían 35'.

Los retos en el complemento le hicieron un click a los jugadores, que salieron con más enjundia a jugar la segunda mitad, sabiendo que tenían la última chance de soñar con la clasificación. Y si bien les siguió costando en los últimos metros, merodeó el área visitante y a los 30' generó un penal que Enzo Astiz canjeó por gol para igualar el partido y ponerle dramatismo al cuarto de hora final.

El empate le dio el envión que necesitaba y tuvo dos opciones netas para desnivelar, primero con un centro de Alejandroff que no llegó a conectar Astiz y luego con un buen remate de Enzo Vértiz que hizo lucir al arquero. Pero eso se pinchó a los 39', cuando expulsaron al autor de la igualdad y parecía que ya no se podría cambiar la historia. Hasta que en el último suspiro, en el tercer minuto de los cuatro que había adicionado el árbitro, Leandro Parra sacó a relucir su capacidad goleadora e hizo explotar Otamendi, con un gol que valió más que un triunfo, que vale una ilusión que está más viva que nunca.