Alvarado se sacó la mufa de la mejor manera

En la última pelota del partido, cuando sumaba el cuarto 1 a 1 consecutivo, Patricio Escott apareció para meter la cabeza a un centro de Molina, ponerla arriba, contra el ángulo izquierdo de Dobboletta y desatar la fiesta en el Minella.

Desahogo, euforia, alegría, bronca contenida. A Patricio Escott ante Agropecuario, le anularon un gol en el mismo arco en tiempo de descuento. Esta vez no hubo marcha atrás y el festejo del exUnión de Sunchales no se hizo esperar. (Foto: Diego Berrutti)

25 de Octubre de 2016 21:47

Por Redacción 0223

PARA 0223

Sufrir para gozar. A lo Alvarado, como indica la historia. Cuando asomaba la desazón por otro triunfo que se escapaba en casa, por el cuarto 1 a 1 consecutivo, sabiendo que se venía una seguidilla de tres partidos de visitante, llegó el desahogo, el festejo, la alegría. Y no fue ni a los ponchazos ni con un pelotazo a la olla, fue con una jugada que intentó a lo largo de la noche y le salió pocas veces: Molina llegó al fondo, levantó un centro bárbaro y Patricio Escott apareció como "9", puso la cabeza perfecto, para mandar la pelota al ángulo izquierdo de un estático Dobboletta y darle el triunfo a los de Duilio Botella por 2 a 1 sobre Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, sobre la hora, para dar el salto a la punta de la Zona 2 del Torneo Federal A, en solitario, esperando con tranquilidad el resto de los partidos de la novena fecha.

Que poco le duró la alegría del comienzo a Alvarado. El arranque del equipo de Duilio Botella fue inmejorable, tomando el protagonismo y poniéndose rápido en ventaja . A los 6', en la primera llegada a fondo, Susvielles quiso aguantar en el área pero se la puntearon, la peleó y ganó Escott, aceleró hasta el fondo dentro del área y tocó al medio para el ingreso de Gabriel Compagnucci que sólo tuvo que poner la parte interna del pie derecho para abrir el marcador. Hasta ahí, todo era alegría en el Minella, con el "torito" como dominador del partido y con ganas de más, aun sin tener la profundidad necesaria.

Pero a los 15', cambió el partido. Ponce quiso meter un cambio de frente y le salió mal, recibió Cartechini y lanzó para Capurro, que llegó al fondo y metió un centro que controló alto Castro, giró y buscó tocar de cabeza para Coronel, Compagnucci que venía corriendo para cerrar se encontró con la pelota de frente, fue directo a la mano y Sergio Testa no tuvo otra que cobrar el penal. Federico Castro lo ejecutó con solvencia, la metió arriba, a la izquierda, lejos de las chances de Beltramella que había buscado el otro lado. 

Tenía que empezar de nuevo el local, y recibió otro golpe. En una pelota que peleó en la mitad de la cancha, Joaquín Susvielles sintió un pinchazo en el abductor y enseguida pidió el cambio. Otra baja importante para Botella en el ataque, que ya no cuenta con Ceballos, que tiene afuera a Albarracín y entre algodones a Escott. La salida del "9", la sintió todo el equipo. Ya casi no inquietó a Dobboletta, salvo centros de los costados y alguna corrida de Molina o Compagnucci por las bandas.

La visita se acomodó y empezó a hacer su juego. Esperar, recuperar y buscar las espaldas de los laterales para las corridas de Coronel y Castro. En los 5' finales, tuvo dos ocasiones netas para irse en ventaja al descanso. Primero con un gran pase en cortada de Saucedo a Castro, que quedó mano a mano con Beltramella, en vez de definir eligió tocar adentro para Coronel que no la esperaba y a pelota se perdió por el fondo. En la siguiente, la más clara. El arquero marplatense rechazó mal, al medio, Cartechini rechazó con tanta suerte que fue directo al pie de Castro, en la medialuna, de cara al gol, pero el "uno" se repuso velozmente, no lo dejó pensar y con todo el cuerpo tapó sobre el borde del área grande para que se vayan al descanso en tablas.

Al regreso del vestuario, el juego seguía siendo aburrido, sin situaciones, con Alvarado sin saber cómo llegar al arco de Dobboletta y Defensores demasiado cómodo con el resultado, enfriando todo el tiempo el partido, haciendo tiempo y jugando con la desesperación del local. A los 14', lo mejor del "torito" en el complemento, controló Beltramella y salió rápido con Gáspari. El exSantamarina trasladó desde su área hasta tres cuartos de campo rival, los defensores se cerraron y habilitó perfecto a Compagnucci que metió el centro bajo que por centímetros nadie llegó a empujar por el medio. Enseguida, la tuvo Uribe tras un centro desde la derecha, y el zurdazo se perdió cerca del caño derecho.

Alvarado empezaba a tomar de nuevo el control del partido y trataba de manejar la pelota. Un córner de Coronel que Mondino cabeceó apenas afuera, sobre el palo derecho de Beltramella, llevó preocupación para el local, que respondió rápidamente con otra buena llegada de Molina por izquierda y el centro bajo que, de casualidad, Mignaco no metió contra su propio arco. El empate estaba bien, ninguno de los dos hacía méritos suficientes para llevarse los tres puntos, aunque el dueño de casa era el único que buscaba la victoria, aunque carecía de pofundidad. Una pelota parada podía ser la salvación, Nahuel Santos ejecutó bien un tiro libre en el borde del área, pero se perdió cerca del ángulo derecho de Dobboletta.

El partido se moría, Defensores firmó el empate pero le quedó una en la que pudo llevarse los tres puntos. Coronel aprovechó un error de Gáspari en la mitad y fue hasta el fondo, sacó el centro bajo y Bielkiewickz, mordido, la tiró apenas afuera sobre el caño izquierdo de Beltramella que estaba vencido. No había tiempo para más. O eso parecía. Porque Alvarado sacó a lucir una jugada muy trabajada y que poco había salido en toda la noche. Ganó Molina por izquierda, cabececó Escott por adentro y la victoria quedó en casa. Sufriendo, gozándolo más. A lo Alvarado.