Quilmes se hizo fuerte en la adversidad y se quedó con el clásico

El "Cervecero", con personal acotado y una gran defensa, festejó ante Peñarol: 69 a 60. Figuras repartidas en una noche donde el equipo fue más que las individualidades.

El festejo alocado de todo Quilmes tras el partido (Foto: Diego Berrutti / 0223).

28 de Noviembre de 2016 23:18

Quilmes se sacó las ganas y tuvo su gran noche de festejo en un nuevo clásico del básquetbol argentino. El "Cervecero" sacó fuerzas y con una gran defensa derrotó a Peñarol por 69 a 60, en una tarea de equipo que le dio réditos en momentos decisivos. Así, reafirmó su buen presente, con cinco victorias en las últimas seis presentaciones y alcanzó a su rival en el cierre de la primera fase (récord de 6-8).

El elenco de Bianchelli supo sustituir las bajas de los lesionados Diego Cavaco y Enzo Ruiz con entrega y variantes tácticas. Difícil destacar figuras. Ivory Clark como "titán" defensivo (15 rebotes), lapsos de Luca Vildoza, Tracy Robinson y Eric Flor, cada uno con momentos destacados, y el gran cierre de Bruno Sansimoni, que tomará la posta de Vildoza cuando se vaya a España. El base, con un doble a falta de un minuto, frenó la remontada de un Peñarol que se venía.

Fue flojísimo el inicio del juego. Abrió la cuenta Alejandro Diez con un triple a los 12 segundos, pero luego los dos equipos se mostraron nerviosos, indecisos, erráticos. Recién a los cuatro minutos y medio el chileno Suárez (entró rápido por dos faltas de Reed) con otro triple y un doble de Acuña parecían despegar a Peñarol (8-0). Pero las 5 pérdidas del “Milrayitas” y la buena defensa local le impidieron progresar. 

Quilmes jugó interno pero Basualdo perdió siempre. Tardó 5 minutos y medio para anotar. Y resurgió de la mano de su “joya”, Luca Vildoza, con arremetidas individuales. El base (9 puntos en el segmento) puso directamente al frente a su equipo al anotar un triple a falta de un  (11-10). El “Cervecero” cerró al frente 13-12.

Para el segundo período, el partido tuvo paridad de entrada. Leonardo Gutiérrez no pudo aportarle en ofensiva a un Peñarol muy apurado y que se topó con una marca inquietante de su rival. Quilmes empezó a mejorar con el ingreso de Bruno Sansimoni. Pero tuvo su mejor momento con una rutilante aparición de Tracy Robinson. El norteamericano anotó 12 puntos (3/3 en triples), con decisión, para que a falta de 3m30 el local sacara la máxima hasta entonces (30-22). Tras el minuto de Richotti, Peñarol reaccionó con Diez, Zurschmitten (triple en soledad) y Reed, para un parcial 8-0 que le dio la igualdad transitoria. Sansimoni y Vildoza desde la línea dejaron al frente al “Cervecero” por 35 a 30, con su hinchada encendida y expectante.

Otra vez fue errático el inicio del tercer cuarto. Quilmes parecía complicarse con Basualdo llegando a los 2 minutos a la cuarta falta. Pero ingresó muy bien Ariel Eslava, a la postre una de las figuras. Peñarol empató en 35 con doble+falta de Reed. Logró frenar a Robinson pero no pudo con un gran pasaje de Eric Flor, que venía de un 0/5 en tiros de cancha en el primer tiempo. El ex San Lorenzo comandó una reacción que junto a Vildoza puso a Quilmes con una buena ventaja (48-37, parcial de 11-0).

Peñarol cada vez se tornó más impotente, con enormes dificultades para anotar. Con 0/4 en triples (18 % en toda la noche en el rubro), Gutiérrez errático y frustrado, Reed apagado. El “Tricolor” culminó al frente 50 a 41.

El último parcial fue el cierre del trabajo de Quilmes. Eslava se impuso claramente en la pintura en el arranque, y la diferencia comenzó a subir (+13). Peñarol pareció rápidamente entregar el partido. A los 3 minutos perdió a Roberto Acuña por 5 faltas, y sus jugadores abollaron el aro, frustrados ante la tarea defensiva de su rival. Un buen doble de Robinson, Sansimoni desde la línea y un triple de Clark desataron la locura todavía con casi 6 minutos por delante: máxima diferencia, 61-42. 

Pero Peñarol sorprendió con una reacción tras el minuto de Richotti. Dos dobles del chileno Suárez (9 puntos en este tramo) comenzaron una remontada que tuvo un parcial de 13-1 (62-55), a falta de 2m08s. En el medio, Quilmes perdió por faltas a sus internos Basualdo y Eslava. La visita tuvo un triple que por poco no ingresó para descontar aún más. Y Bruno Sansimoni, cuando la pelota quemaba y la presión era enorme, enfiló al aro entre marcas y anotó un doble tranquilizador a falta de 1m14s. Le cometieron falta, y anotó el libre (65-55). "Chule", con dos defensas y un triple cerró el juego.

Merecida victoria de Quilmes ante el rival de toda la vida. Para festejar y revalidar su crecimiento en este cierre de primera fase.