Facundo Oreja: "Yo hubiera separado, pero si veía que le pegaban a un compañero..."

En el día que el Tribunal de Disciplina de AFA dio a conocer las sanciones para los jugadores de Gimnasia y Estudiantes que protagonizaron la escandalosa pelea el domingo pasado en el clásico platense disputado en el estadio José María Minella, el lateral marplatense del "Lobo", Facundo Oreja, se refirió a lo sucedido, con un interesante análisis. El futbolista surgido de Independiente de Mar del Plata charló con el programa local "Dame Fútbol" (FM Residencias 96.5, miércoles de 20 a 22). 

Oreja fue el primero en sufrir las consecuencias de ese partido violento: a los 13 minutos del segundo tiempo fue reemplazado luego de una violenta patada en la cara del uruguayo Álvaro Pereira, que lo dejó inconsciente por unos minutos. Fue llevado en ambulancia al vestuario, donde fue atendido hasta recuperarse. “Todavía tengo el dolor lógico en la zona de la cara donde me pegó con el botín, y de las cervicales, del golpe tuve un latigazo. Yo lo vi por tele, no tengo el recuerdo de la cancha. Recuerdo que recuperé la pelota ante Auzqui, crucé la mitad de la cancha, quedó la pelota boyando y no me acuerdo más nada. Me reincorporé en la ambulancia camino al vestuario. Mi preocupación mayor fue que estaba mi señora y mi hijo en la cancha, y son los que más sufren.”

Por tal motivo, el jugador de Gimnasia no estuvo presente en los bochornosos hechos. Sin embargo, y siendo uno de los referentes del equipo de Pedro Troglio, su palabra es válida. "Fue una locura. No tiene sentido. Los clásicos se juegan fuerte, sí, son feos porque jugamos con mucha tensión y vehemencia, nadie quiere perder. Pero llegar a la locura que se llegó, más en un verano, es increíble. Trato de ponerme en el lugar de cada compañero. Yo soy una persona muy tranquila y creo que hubiera estado separando, pero hay que ver qué hacés si te pegan un trompazo, o si le están pegando patadas a tu compañero en el piso. Hay que ver cómo reaccionamos. Siempre es más fácil opinar desde arriba, viendo las imágenes un montón de veces. Pero es difícil cuando estás ahí adentro, en el centro de atención. Es triste porque nos perjudicamos todos: los jugadores, el público, el fútbol en sí", sostuvo el jugador de 33 años.

"Yo estaba en el vestuario con el kinesiólogo, y en un momento vinieron los utileros y contaron que se armó una batalla campal. Después empezaron a llegar de a poco mis compañeros y me fueron comentando. A medida que transcurrieron las horas, ví todo por la tele", relató respecto al momento en que se enteró de lo sucedido. Oreja se refirió a cómo estaban sus compañeros luego de la pelea: "Estaban todos convulsionados. Lo que uno trataba de hacer, más allá que estaba boleado, era encontrarle el por qué a esta situación. Son de igual manera responsables los dos equipos. Habrá que pagar, y ojalá realmente no se vuelve a repetir. Uno aspira a eso, pero hoy está todo tan loco que no se sabe", agregó.

El exAldosivi, sin querer justificar a nadie, dio su parecer sobre los protagonistas y sus cualidades como persona: "Hay un arrepentimiento de todos. Y no es que hablo con el cassette. Si yo te cuento cómo es Nico Mazzola (recibió 8 fechas de suspensión), vos no vas a poder creer la patada que pegó. Te estoy hablando de un tipo inteligente, educado, habla bien, es coherente, con buenos valores. Y pegó esa patada y me decís: "me estás gastando". Él me comentaba "me veo en la tele y no veo que sea yo". Y así otros chicos. A veces uno puede entenderlo en los más chicos esto, pero de gente adulta como Andújar la verdad que choca un poco, como con los adultos nuestros. Hay mucho arrepentimiento", manifestó Oreja a los periodistas Leonardo Rodríguez, Sebastián Arana, Pablo Colombet y Francisco Giovanoni.

"Para mí como espectador, ver esa debacle, sería fácil opinar. Pero no me pongo en ese papel porque realmente yo estoy del otro lado y sé que a veces las cosas se te van de las manos, como pasó. Lo hecho, ya está. Es triste porque no fue un buen ejemplo para nada. Solo me limito a pensar lo que hubiera hecho yo", añadió el exFerro. "Cuando jugamos la Sudamericana estuvimos a punto que se arme un problema importante, pero nos controlamos todos. Yo me hubiera controlado porque a esta altura de mi vida detesto la violencia. Pero en el inconsciente de uno, sabes que estos partidos son difíciles de jugar porque si perdés quedás marcado, sos carne de cañón, porque hoy lo que vende es el que pierde, no el que gana. Son torneos complicados para jugarlos, incómodos porque uno no está todavía físicamente de la mejor manera para afrontarlos. Yo creo, que si hubiera sido un partido oficial, nos hubiéramos cuidado un poco más", declaró Oreja, respecto a la dicotomía que genera un partido de verano "light" para los jugadores pero de "vida o muerte" para el hincha y la prensa.

"Cuando era chico iba a ver los torneos de verano y como hincha la pasaba bárbaro. Pasa que hoy tenés al día siguiente 15 programas analizando cómo jugamos como si fuera un partido oficial. Y ya están sacando conjeturas de los técnicos. Si pierde San Lorenzo con Boca (juegan el 10 de febrero la Supercopa), o viceversa, ¿qué va a pasar con Guede o Arruabarrena, que perdieron en el verano? Es una locura. Resultados, resultados y resultados. Paren un poco. Son lindos estos partidos pero entiendan que son un partido de preparación. Lo importante empieza este fin de semana", añadió el defensor sobre la importancia relativa de los cotejos veraniegos.

"Parece que los futbolistas tenemos que ir a la cancha a solucionarle los problemas a la gente"

Facundo Oreja realizó un análisis sobre cómo afecta el entorno del fútbol argentino a lo que sucede dentro del campo de juego. La locura, la pasión desbordada de los hinchas, la presión de la prensa y su amarillismo: "No es excusa. Eso lo sufrimos. Después, que uno reaccione a las trompadas queda en cada uno. Pero yo que soy tranquilo, te puedo asegurar que eso pasa. Si pierdo un partido, te tildan de horrible, que te tenes que ir, sos un muerto. Si perdés un partido importante, que fueron para atrás, no arreglaron los premios, son unos hdp (sic). Todo el tiempo. Y hoy con las redes sociales todos opinan y hablan, son todos técnicos. Y no sólo técnicos, porque ya ni hablan de fútbol, hablan de la persona, va mucho más allá. Mucha prensa no analiza como antes el juego en sí. Se van buscando el amarillismo. Pasa en muchas cosas. Claro que soy tranquilo, no lo busco como excusa, pero eso harta un poco", expresó un encendido Oreja en su relato. 

"Ayer escuchaba a Maxi Rodríguez en conferencia de prensa y fue extraordinario lo que dijo ese muchacho. Es un poco lo que nos pasa a muchos futbolistas. Parece que tenemos que ir a la cancha a solucionarle los problemas a la gente. Le están dando lugar a un tipo que nos amenazó con balas por twitter. Mirá lo que es el amarillismo del fútbol, si ese tipo no nos insulta, no nos maltrata, no nos desprecia, el tipo no es ni conocido. Y hoy lo difunden por que hace esto. Es impresentable. Pasa en el fútbol y todos lados"

Es cierto que en el debate generado en estos días, las críticas hacia los jugadores fueron duras, con justicia por el acto en sí. Aunque también a veces se le pide al jugador que sea la imagen perfecta, en un ámbito del fútbol argentino que deja mucho que desear en todos los ámbitos. Oreja fue crítico ante eso: "Nosotros tenemos que dar el ejemplo y después los dirigentes no pueden realizar una votación de 75 tipos. ¡Vamos!. Es enorme el fútbol, detrás de nosotros hay un mundo de gente que se llena de plata sin haber pateado nunca una pelota. Gente que decide si trae un refuerzo o no sin saber nada de fútbol. Así con un montón de cosas. Yo digo que el futbolista es sano. No digo todos, porque como en todo ámbito, están los buenos que son las mayorías, y siempre hay algún malo. No hay que generalizar en nada. Pero somos los que más expuestos quedamos, y sí te digo que somos por lo menos honestos", expresó el marplatense en defensa de los futbolistas.

Por último, y ante la cantidad de sancionados, Facundo Oreja se refirió a los objetivos que tendrá Gimnasia este torneo: "La idea era hacer una buena campaña, sabemos que enfrentaremos a equipos con mucha jerarquía pagada por el dinero. Ahora con todo esto habrá que ver. Primero cómo parará el equipo el técnico, y luego iremos partido por partido", cerró.