Peñarol se despidió con más pena que gloria

No pudo Nicolás Brussino. Sin estar en plenitud, el escolta se puso el equipo al hombro y fue el único que, por algún momento, mantuvo la ilusión de Peñaron en la semifinal de la Conferencia Sur de la Liga Nacional. Porque en el resto, Bahía Basket fue superior y fue un claro y justo ganador, que se llevó el cuarto punto por 76 a 59 y cerró la serie 3 a 1, para meterse en la definición ante San Lorenzo. Los "pibes" de Sebastián Ginóbili se convirtieron en hombres y se sacaron de encima al multicampeón marplatense, que terminó la temporada como la jugó, con mucha irregularidad y sin una línea de juego definida.

El primer cuarto, como gran parte del partido, lo dominó el local de la mano del goleo de Juan Pablo Vaulet con 7 puntos. Bahía Basket lo ganó 18 a 12 ante un Peñarol al que le costó atacar, salvo por las manos de Nicolás Brussino.

En el segundo, se arrimó el “Milrayitas” cuando al goleo del joven de Cañada de Gómez se le sumó Alejandro Diez, importante en ofensiva aunque se cargó rápido de faltas (3). Con un triple de Brussino, el elenco de Sergio Hernández se puso a 1 (28-27), pero Anthony Johnson con diez unidades sacó la cara por sus compañeros aunque el desarrollo ya estaba equilibrado. Los orientados por Sebastián Ginóbili se fueron arriba por tres al sonar la chicharra (34-31).

Mientras Brussino seguía tirando del carro en soledad, del otro lado aparecía con gol Lucio Redivo para que los locales se alejaran por 5 (38-33), aunque los “Milrayitas”, en un segmento de bajo goleo, se mantuvieron siempre expectantes y se fueron abajo nada más que por un punto (45-44).

En el último no hubo juego ni reacción, Bahía Basket fue muy superior y marcó un lapidario parcial de 31-15 para clasificarse a la final de la Conferencia Sur contra San Lorenzo. El 11-0 de los primeros instantes conspiró contra el envión del tercer cuarto y ya no aparecieron más respuestas para intentar torcer la historia y conseguir un triunfo que devolviera la serie a Mar del Plata para definirla en un quinto partido.