Fiesta y título de Lanús en el Monumental

El mejor equipo del fútbol argentino en el campeonato de 30 equipos lo ratificó en la finalísima ante San Lorenzo y lo aplastó por 4 a 0, para sumar su segunda estrella a nivel local.

El Monumental se tiñó de granate. Baile en el partido y festejo de Lanús con el merecido título de campeón. (Foto Télam)

29 de Mayo de 2016 19:00

Por Redacción 0223

PARA 0223

Fue el mejor del semestre y si hacía falta demostrarlo de alguna manera, era en la finalísima del Torneo de Transición de Primera División. Y lo hizo con altura, con creces y con una verdadera paliza. Lanús no le tuvo piedad a San Lorenzo, lo goleó por 4 a 0 y desató una fiesta en el Monumental que siguió en las calles del barrio del sur del Gran Buenos Aires. Benítez, Almirón, Sand y Acosta fueron los autores de los goles para que no haya ninguna duda. Los de Jorge Almirón se quedaron con el merecido título de campeón.

El "granate" fue el mejor de la zona 2 de esta inédita edición del campeonato de Primera División y en el partido definitorio ante San Lorenzo, el ganador de la zona 1, demostró todo lo bueno que realizó durante el semestre y se consagró merecidamente campeón luego de nueve años. La última vez había sido en 2007 en La Bombonera y hoy el club de la zona sur bonaerense volvió a gritar campeón pero en el estadio Monumental, la casa del otro gigante del fútbol nacional.

En un gran final con un marco a la altura, con la presencia de público de ambos equipos, Lanús fue ampliamente superior a San Lorenzo y el abultado resultado fue el reflejo de lo que sucedió durante todo el trámite. El mediocampista paraguayo Miguel Almirón fue la figura excluyente del partido ya que fue imparable por el sector izquierdo y anotó el segundo gol que empezó a definir el partido. En el duelo de jóvenes entrenadores, Almirón tuvo un papel clave ya que se decidió por Oscar "Junior" Benítez por sobre Pablo Mouche y el juvenil respondió al marcar el primer gol que abrió la historia en el Monumental de Núñez. En cambio, Pablo Guede no pudo encontrar un reemplazante acorde a lo que representa Néstor Ortigoza, ausente por lesión, en su equipo y nunca le encontró la vuelta al planteo de Lanús.

Este equipo de Almirón, quien recogió el buen trabajo de los mellizos Guillermo y Gustavo Barros Schelotto, será recordado por la intención de siempre querer jugar al fútbol y no renunció a ese estilo ni en el partido más importante del semestre. Una muestra de su juego por el segundo gol que convirtió Almirón que comenzó con un saque de arco de Fernando Monetti y terminó con el paraguayo definiendo mano a mano ante Sebastián Torrico, de floja respuesta.

No obstante, el "granate" se puso arriba en el marcador en el primer tiempo, a los 18', cuando sacó rápido un tiro de esquina desde la izquierda y Maximiliano Velázquez, símbolo del club y presente en tres de los cuatro títulos, envió un centro perfecto a la cabeza de "Junior" Benítez, quien la peinó y la ubicó al segundo palo.  El gol le dio más confianza a Lanús que hasta los 30 minutos de la primera etapa borró de la cancha a San Lorenzo. Los últimos quince del primer tiempo fueron lo mejor del equipo de Pablo Guede que con algunos avisos de Ezequiel Cerutti y Fernando Belluschi visitó el área de Monetti.

En la segunda etapa, el equipo azulgrana intentó con el ingreso de Pablo Barrientos pero Lanús no se achicó y fue en busca de más. El premio fue el mencionado gol del "Di María paraguayo".
Para que la fiesta "granate" sea completa luego llegaron los goles de Lautaro Acosta y José Sand, los otros sobrevivientes del título de 2007 (el otro es Agustín Pelletieri). El eterno "Pepe", de 35 años, marcó su gol número 14 y tal como sucedió nueve años atrás también fue se erigió como el goleador del campeonato. El "Laucha", por su parte, decoró la goleada para que los dos minutos finales sean una fiesta al costado del campo de juego y en las tribunas que colmaron los "granates".

Merecido triunfo y título para este Lanús que le alcanzó con 14 de los 16 partidos de la primera ronda con doce triunfos, dos empates y dos derrotas (la última con equipo alternativo) para ser el mejor de la zona 2 y no se achicó en el partido más importante del torneo.