“No lo quise matar” dijo Mansilla en el cierre del debate

Se cerraron las testimoniales en el juicio por el crimen de “Tito” Arriagada. El imputado pidió perdón y dijo que buscó ayuda desde el comienzo. Este jueves se harán los alegatos.

6 de Julio de 2016 15:18

Por Redacción 0223

PARA 0223

Más allá de las declaraciones de uno de los médicos que recibió a la víctima en el Higa y dos expertos en artes marciales que explicaron detalles de la actividad, la tercera audiencia del juicio por el crimen de Francisco “Tito” Arriagada tuvo como punto central la declaración del único imputado: Martín Mansilla dijo que no tuvo intención de matarlo, pidió perdón por haberlo golpeado y dijo que nunca imaginó que podía pasar algo así.

Mansilla reconoció antes los jueces jueces Alexis Simaz, Roberto Falcone y Néstor Conti que amenazó con una navaja al herrero de 64 años para que bajara de la camioneta con la que había atropellado a un perro en Tejedor y Ferré. Ese accionar previo al golpe que provocó la caída de la víctima y el golpe con el cantero central ya había sido ratificado por los testigos presenciales del incidente.

El imputado dijo que cuando la gente se acercó a preguntar lo que había sucedido el reconoció que lo había golpeado para que “no se subestimara lo que había sucedido”. “Apenas llegó el primer patrullero le dije que llamaran a una ambulancia y aclaré que yo me iba a ir con él en mi auto o en la ambulancia mientras di mis datos personales”, señaló.

Mientras respondía las preguntas del fiscal Alejandro Pelegrinelli y del defensor César Sivo, el imputado se mostró dolido y arrepentido por haber “pegado una piña”. “Yo insistí en que lo atendieran junto a otras personas que estaban en el lugar y le decía a las personas que consultaban que se había golpeado la cabeza”, recordó. Luego de señalar que no se imaginó ese resultado, lloró, pidió disculpas y dijo que no lo quiso matar.

Los integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal 2 también escucharon a uno de los médicos que recibió a Arriagada en el Higa y a dos expertos en artes marciales que detallaron cuestiones relacionadas con la actividad que Mansilla practicaba. En la segunda audiencia el médico que hizo la autopsia sostuvo que el golpe que desvaneció a la víctima “no fue un golpe común”. En la audiencia previa también quedó claro que las heridas detectadas en la base del cráneo se produjeron tras la caída de la víctima.   

Este jueves desde las 9 de la mañana la fiscalía hará su alegato en la línea que mantuvo desde el comienzo de la instrucción: el hecho juzgado es un homicidio simple. A continuación la defensa planteará –en sintonía con lo resuelto por la Cámara de Apelaciones y Garantías- que se trató de un homicidio preterintencional que prevé una pena de 3 a 6 años de prisión.