Adoptaron una beba en Catamarca y una jueza de Mar del Plata se las quitó: presentan un hábeas corpus

Una pareja asegura que desde hace cuatro meses no pueden ver a la pequeña de 21 meses, luego de que la jueza Adriana Rotonda dispusiera una medida de abrigo. "La actitud de la jueza es de una crueldad extrema", dijo el abogado de la pareja.

23 de Enero de 2017 12:26

Por Redacción 0223

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Cuando H. tenía cinco días, una pareja de marplatenses la adoptó, luego de cumplir con los trámites judiciales que se requerían en aquella provincia. Con autorización de la madre biológica, se vinieron a vivir a Mar del Plata para completar aquí los trámites de adopción. Pero en octubre del año pasado, la jueza de Familia dispuso una medida de abrigo y desde ese entonces Mercedes Calcagno y Juan Carlos Méndez no tienen contacto con la pequeña que ahora tiene 21 meses.

Ante esta situación, acudieron al abogado Julio Razona, quien por estas horas presentó un hábeas corpus para que la criatura sea restituida a sus padres adoptivos y una denuncia en la Suprema Corte de Justicia bonaerense contra la jueza.

“Hace cuatro meses que la nena que está incomunicada y privada de su libertad, ha sido arrancada de sus padres de corazón, que están realizando los trámites de adopción y que la han criado desde su quinto día de vida”, explicó Razona.

El letrado destacó que el trámite de adopción se realizó “en forma legal”, con “expresa conformidad de la madre biológica de la niña, que se expresó ante la jueza de Catamarca”. Sin embargo, advirtió que en Mar del Plata “ante la implementación del nuevo Código Civil” y algunas “formalidades” que se aplican en esta provincia, pero no en la norteña, la jueza decidió quitarle la guarda de la pequeña a la pareja.

“De forma intempestiva retiró a la nena de sus padres, la institucionalizó en un establecimiento del barrio Las Heras y les prohibió el acercamiento a los padres adoptivos, hace cuatro meses que está en ese lugar”, dijo el abogado.

Los padres adoptivos de la criatura contaron que durante los primeros días podían hablar telefónicamente con los cuidadores de la beba, pero denunciaron que la jueza se enteró de ese vínculo y también les prohibió tomar contacto con sus cuidadores.

Ellos se enteraron que le nena sufrió distintas enfermedades por las que debió ser atendida en centros sanitarios y, en dos oportunidades, en el Hospital Materno Infantil. “No sabemos nada del estado de salud de la nena”, dijo su papá adoptivo.

“La actitud de la doctora Rotonda es de una crueldad inexplicable”, dijo Razona, quien confirmó que presentó una denuncia ante la Suprema Corte contra la jueza de Familia.

Calcagno contó que el día que nació la beba iniciaron el trámite en la Justicia de Catamarca y destacó que tanto ellos como la mamá biológica actuaron de “buena fe”.

“Ha sido muy fuerte. H. fue muy importante para nuestra vida. La chiquita ha sido la razón por la que estamos nosotros en esta vida, la hemos criado con amor. No podemos describir lo que sentimos”, concluyó.