Kimberley clasificó en un partido que no terminó

Una serie de protestas de los jugadores de Argentinos de 25 de Mayo, cuando el "dragón" se imponía por 2 a 1, a los 30' del complemento, llevaron a una fuerte sanción disciplinaria del árbitro, que suspendió el partido e informó a seis jugadores visitantes. 

12 de Febrero de 2017 19:32

Por Redacción 0223

PARA 0223

La brutal golpiza que recibió Claudio Elichiri en Ayacucho, sirvió como enseñanza para los árbitros que no arriesgan más. Llevan los partidos con rienda corta y, ante la más mínima sospecha de que algo malo puede pasar, cortan por lo sano. Eso es lo que hizo Víctor Hugo González, el tandilense que dirigió Kimberley ante Argentinos de 25 de Mayo por la vuelta de la fase inicial de la Copa Argentina. Tras una serie de protestas de los jugadores visitantes, con el resultado 2 a 1 a favor del "dragón", actuó con inteligencia. Llamó a la policía, enfiló hacia el vestuario y allí informó a seis jugadores albiazules, por lo que el partido fue suspendido por inferioridad numérica, pero con él ya resguardado en su camarín. Los de Mignini avanzaron a la próxima instancia.

Argentinos sabía que no tenía mucha más opción que salir a buscar el triunfo y quiso presionar bien arriba desde el pitazo inicial. Kimberley,tranquilo, mostró que tenía un plan B y rápidamente sorprendió con un contra ataque que terminó en córner. Pero lo más claro en el arranque, fue de la visita. No por méritos propios, sino por dos fallas de Zappacosta, que primero se le escapó una pelota con suerte porque iba tomando altura y se fue apenas arriba del travesaño y de ese tiro de esquina, se le cayó un centro pero no había nadie de la visita y controló en segunda instancia.

Sin embargo, el "dragón" mostró una velocidad distinta y cuando aceleró, rápidamente abrió el marcador. A los 4', Rondanina anticipó de cabeza y exigió una gran respuesta de Amarilla, pero se tomó revancha segundos después, se encontró una pelota suelta en la medialuna, se acomodó y sacó el zurdazo letal, fuerte, al medio del arco, para sellar el 1 a 0 y darle tranquilidad a los de Mignini. Se notaba que habían quedados algunas esquirlas ya sea del Federal B pasado o del choque de ida, porque cada falta terminaba en cruces entre los jugadores. Un patadón de García, que la sacó barata con la amarilla, generó una serie de empujones que por suerte no pasó a mayores. El encuentro era equilibrado, con más claridad a la hora de jugar del dueño de casa y el amor propio de la visita para ir por un empate que lo vuelva a meter en carrera por la clasificación.

La única forma que parecía que podía lastimar Argentinos, era de pelota parada. Y tras un córner en el que Kimberley se durmió y le hicieron una jugada preparada, González cobró una mano dudosa de Barreiro en el borde del área, Diego Rivarola ejecutó con categoría por encima de la barrera, Zappacosta voló pero la pelota fue directo al ángulo derecho y el rebote cayó en la cabeza de Jorge Liendo que sólo tuvo que empujar para sellar un empate que no merecían los de 25 de Mayo.

Con el empate, ganó en confianza el conjunto visitante y empezó a justificar el resultado, más firme, sin pasar sobresaltos e inquietando en ataque, con Rivarola y Montiel como principales generadores de juego, a espaldas del doble cinco albiverde. En tablas se fueron al descanso y la serie estaba totalmente abierta.

Otra vez le costó a Zappacosta el arranque del complemento y Kimberley lo pudo pagar caro. Primero dio un rebote demasiado largo tras un remate que iba sin fuerza y, enseguida, perdió arriba con Liendo y la pelota se estrelló en caño izquierdo. Se lo llebaba por delante Argentinos y el "dragón" no podía reaccionar. El arquero se "despertó" y reaccionó bien para sacar con los puños un disparo de Rivarola que se le había cerrado. El partido era malo, los de Mignini emparejaron y trataron de llevar el juego al campo de Argentinos, que era el que tenía la obligación. Igual, era más la visita, que tuvo otra vez una ocasión neta con otro error de Zappacosta que Sequeiro no supo aprovechar y cabeceó apenas afuera.

Pero cuando poco hacía Kimberley para tomar la delantera, una pelota parada le acomodó el partido. Un gran centro de Mañas en posición de "8" encontró un excelente anticipo otra vez de Erramuspe  que peinó y puso la pelota abajo, lejos de la estirada de Amarilla. El gol derrumbó a Argentinos y el "dragón" casi lo define. Lautaro García exigió al arquero desde afuera y, de ese córner, Baigorria reventó el travesaño.

Pero una vez más surgieron los inconvenientes de la primera mitad. Una falta fuerte de Mañas desencadenó un nuevo tumulto, empujones, los cuerpos técnicos y la policía separando, hasta que todo se calmó y decidió la expulsión del infractor y de Lopardo, el central visitante que había saltado a hacer justicia por mano propia. Ahí, los jugadores visitantes se fueron encima de González para protestarle que Erramuspe tendría que seguir el mismo camino, por un fuerte empujón en las narices del árbitro. Ahí se terminó de complicar, el juez llamó a la policía y enfiló al vestuario suspendiendo el encuentro a los 30' del complemento. 

Cuando parecía raro que González entendiera que no había garantías, con la policía actuando con rapidez para separar, lo que había pasado fue que en medio de las protestas a más de un jugador visitante se le fue la boca (o la mano) y tenía que expulsar a seis hombres de Argentinos. Para no hacerlo dentro de la cancha y dar lugar a una reacción que podría haber terminado mal, prefirió irse al vestuario y allí informar todo en la planilla y suspender el encuentro por inferioridad numérica, lo que dio automáticamente el triunfo y clasificación a Kimberley.