La mejoría de Quilmes no alcanzó

Si bien el resultado final indica que Bahía Basket ganó por sólo cinco puntos (98-93), en el tercer cuarto quebró el partido el local que se puso 2 a 0 en la serie de playoffs y obliga al "tricolor" a ganar los dos juegos en casa.

Dos de las "joyas" de la Liga Nacional mostraron todo su repertorio. Lucio Redivo (35) y Luca Vildoza (27), fueron las grandes figuras de la noche. (Foto: Maite Méndez/LNB)

24 de Mayo de 2017 23:11

Por Redacción 0223

PARA 0223

Lo más importante para Quilmes, más allá del resultado final, era demostrar y demostrarse que lo del lunes fue sólo una mala noche, que no hay 40 puntos de diferencia entre un equipo y otro y que está capacitado para pelearle de igual a igual a Bahía Basket. Si bien el local fue otra vez superior, el equipo de Bianchelli trabajó el partido y estuvo en juego en gran parte de la noche, hasta que los de Ginóbili lo quebraron en el tercer cuarto y el marcador se decoró en el final para el 98 a 93 que dejó 2 a 0 la serie de playoffs de reclasificación, que obliga al "tricolor" a quedarse con los dos juegos en el Polideportivo para devolver la serie a Bahía Blanca en un definitivo quinto encuentro. En los marplatenses brilló Luca Vildoza con 27 puntos, pero la diferencia la marcó Lucio Redivo, con una descollante actuación de 35 unidades. 

El primer objetivo lo cumplió Quilmes en la primera mitad del cuarto, cuando pudo frenar los embates de Bahía Basket, no le permitió correr como el lunes y, además, estuvo más fino en el aro rival para mantenerse a tiro y no dejar que se le escape y empiece a manejar el juego a su gusto. Con la conducción de Luca Vildoza, el goleo de Eric Flor (9 en el chico) y el aporte de Iván Basualdo en la pintura, llevó el trámite al lugar que más le convenía hasta el tramo final, cuando se descuidó, no pudo sostener la intensidad y luego de estar 21 a 16, sufrió un parcial de 11-1 que le dio la ventaja al local en el descanso chico por 27 a 22.

La tónica siguió en el segundo capítulo, rápidamente volvió a emparejar el marcador el equipo marplatense y comenzaron a alternar el dominio del tablero, con mayor peso en ataque de Vildoza (10 en el chico), con la colaboración de Enzo Ruiz (8), para no dejar que Bahía se despegue de la mano de Lucio Redivo, que seguía siendo la principal vía de gol local. Lo único que no le convenía a los de Bianchelli, era que el tanteador seguía siendo muy alto, y para tener mayores posibilidades, necesitaba achicar el goleo "albo". De todas maneras, el parcial favoreció al "tricolor" por 25 a 24 y se fueron al descanso con el local arriba por 4: 51-47.

En el tercer cuarto se empezó a quebrar el partido.Porque el local siguió manteniendo un buen promedio de casi 25 puntos por chico y Quilmes no lo pudo sostener. Lo que se prevía, se terminó dando. Lo que necesitaba la visita era controlar los ataques rivales para tener chances y, sin embargo, sufría cada vez que le corrían la cancha, mientras que bajó el porcentaje a favor y el juego se le empezó a escapar. De los cuatro puntos con los que se fueron al vestuario, a los 14 (73-59) con los que llegaron al último descanso corto, parecían encaminar el triunfo de Bahía Basket.

Más allá de los denodados intentos de achicar la brecha, la cosa estaba juzgada. El local siempre supo mantener la ventaja y Quilmes no tuvo argumentos para ir por la hazaña. Lo más cerca que se puso fue a 10 (77-67) a falta de 6'40" para el cierre del juego, y de ahí en más la luz rondó entre los 12 y los 16 puntos, con Bahía regulando en el tramo final y el "cervecero" sabiendo que tiene que venir a Mar del Plata con la obligación de ganar los dos juegos para devolver la serie al sur de la provincia. El final, con el resultado decorado con una pequeña ventaja de 5 puntos (98-93), le demostró a los de Bianchelli que no es imposible dar vuelta la historia, que tiene que festejar las dos noches ante su gente y que la presión sea de Bahía Basket, en un hipotético quinto juego.