“Sería muy estúpido que no mejorara como comediante después de lo que viví”

A pocos días de volver al ruedo en la Argentina tras su visita a Hollywood como ganador del concurso AcercArte, el humorista marplatense Pablo Vasco dialogó con 0223 sobre su experiencia en el Laugh Factory, el club más grande de comedia en Estados Unidos.

28 de Mayo de 2017 18:27

Por Redacción 0223

PARA 0223

Con el mérito de haberse convertido en forma reciente en el primer marplatense en subirse al escenario del mítico Laugh Factory, en Long Beach, California, el comediante Pablo Vasco vive días de auténticos simbronazos. “Estoy disfrutando de este momento, tratando de caer un poco con el transcurso de los días, fue muy fuerte” admitió en el primer instante de su conversación con 0223, una de las tantas que ofrece por estos tiempos de requerimientos y consultas de prensa.

“Me imaginé que íbamos a ser 20 humoristas en una reunión y terminé por conocer a Cisco, un comediante de ascendencia mexicana con quién nos juntamos primero en un bar, a charlar unas horas para luego recibir una interpelación y comenzar a trabajar mi propio material. Así fuimos armando lo que fue mi posterior presentación”, describió Vasco, notoriamente revolucionado.

La aventura de este también conductor de radio en FM Residencias fue compartida con Laura Arce, una artista de la ciudad de Buenos Aires con quien conformó el binomio argentino presente en el club de comedia más grande de Estados Unidos. “Fuimos los dos a conocer el circuito de comedias de Hollywood. Allá hay una cultura muy grande en el rubro, el comediante es un ser muy respetado, no se considera al humorista un personaje menor. El público va a reírse a los espectáculos, no es que va a cerrar un negocio o tener un encuentro y de paso ver al comediante”, reflejó.

Luego de varias reuniones y devoluciones de Cisco durante la estadía y rumbo a su show de cierre, Vasco contó: “Empecé a preguntar con qué público me iba a encontrar, porque no iba a perder la esencia argentina pero tuve que cambiar algunas palabras y sumar material que no fuera eminentemente local. Utilicé lo que tenía y le fui agregando lo que hice durante el curso. Fue intenso, porque me habían advertido: vas a tener un solo tiro, andá con lo mejor que tengas. Y de los 15 minutos que inicialmente me dieron, se sumaron 6 minutos nuevos. Fue un tiempo largo y además, en la ubicación en la grilla me pusieron antes del número central. Lo que expuse lo escribí especialmente para el público de ese show, mayoritariamente mexicano. Me sentí confiado, es un lugar que nunca pisas en tu vida y empecé a jugar y tener presente que no me conocía nadie, ellos no sabían si yo la estaba pasando mal. Disfrute mucho. No fue algo impresionante, pero se rieron cuando se tenían que reír”, se sinceró, faltaba más, en clave de humor.

Sería muy estúpido que no mejorara como comediante después de lo que viví. Es una posibilidad de profesionalizarse, me lo estoy tomando en serio” sentenció de inmediato a pocos días de terminar con la experiencia. “Se abrieron las puertas, también se que muchos dicen ¿quién es este chabón?, pero hay nuevos contactos, aunque soy consciente de que no fuí por que me vió un productor, fue debido a que gané un concurso, es algo meritorio”, concluyó entre la humildad y la realidad del histórico logro obtenido.

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