Sin feria ni turistas, las ventas en las librerías se terminaron de desplomar con el brote de coronavirus

La situación se profundizó por el presente epidemiológico. Las editoriales realizan entregas mínimas. "La gente anda menos en la calle y lo sentimos en los locales", remarcaron.

La Feria del Libro Infanto-Juvenil se pensó en un formato virtual, pero finalmente quedó desestimado. Foto Ilustrativa: 0223.

1 de Agosto de 2020 14:43

Por Redacción 0223

PARA 0223

A pesar de que cuentan con la habilitación para funcionar, las secuelas de la pandemia de coronavirus siguen golpeando a los distintos sectores. La caída en las ventas que registran las librerías se profundizó en julio tras el brote de contagios de coronavirus, la cancelación de la Feria del Libro Infanto-Juvenil y la ausencia de turistas para el receso invernal.

Damián Ale, presidente de la Cámara de Libreros del Sudeste de la provincia de Buenos Aires, reconoció que los comercios intentan "levantar un poco los locales". "A pesar de tener abierto, las ventas no se coinciden con lo que era antes", confesó en declaraciones formuladas a 0223 Radio.

Para los comerciantes liberos, julio es uno de los meses más importante del año. Además del flujo de turistas, para esta época estaba previsto organizar la Feria del Libro Infanto-Juvenil. Incluso, se barajó la posibilidad de llevar el formáto a una edición virtual, pero los contratiempos no lo permitieron.

"Se nos había ocurrido que, al no tener la posibilidad de que la gente se acerque, hacer una feria virtual. Planteamos la idea, pero se decidió hacerla por una cuestión de tiempos", explicó y agregó: "Sumado a no tener visitantes, julio obviamente no fue importante".

Hoy por hoy los canales virtuales son un refuerzo extra. "Es un granito de arena, pero no suplanta jamás la venta del local. Obviamente ayuda, antes que tener los locales cerrados", destacó.

Pero la escalada de contagios de Covid-19 que vive Mar del Plata desde comienzos del mes no hicieron más que profundizar la caída de las ventas. "A raíz de los casos, la gente anda menos en la calle y lo sentimos en los locales", reconoció.

Otro de los termómetros que expone esta situación que describe el empresario librero es la mínima entrega de unidades por parte de las editoriales. "Recibimos dos o tres ejemplares. El reparto es muy menor al que se recibía normalmente". Para Ale la situación es "entendible" porque los grrupos editoriales aguardan por la reapertura de los locales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Ante esta situación, Ale se mostró esperanzado de que la situación "se vaya normalizando de a poco". "Estamos a la espera de que se normalice", concluyó.