Peñarol dio un salto para la gloria

Otra gran noche para Peñarol. En un partido que comenzó accidentado por una demora de casi 70 minutos (ver aparte), el "Milrayitas" volvió a jugar a lo campeón y volvió a superar a Regatas Corrientes, 95 a 91, para dejar la serie final de la Liga Nacional 3 a 1 a su favor. Ahora, los marplatenses cuentan con triple chance de consagrarse. El lunes, en el Litoral, si gana alcanzará el quinto título local de su gloriosa historia.

Un gran inicio de partido para Peñarol, jugando interno para un Martín Leiva muy cómodo para anotar bajo el aro. Con seis puntos del “Flaco”, los marplatenses se pusieron 13-4 en los cuatro minutos iniciales, obligando al tiempo muerto pedido por Casalanguida. Regatas, con Javier Martínez por Hopson en la base y el ingreso de Romano, buscó ataques más largos, estacionados. Pero no fue eficiente en su búsqueda.

De pronto, el tiro exterior se abrió de los dos lados. Quinteros y Martínez en Regatas; Gutiérrez y Fisher en Peñarol, para dejar a su equipo 19-10 luego de una gran asistencia de Campazzo. Allí Peñarol aprovechó el envión. Martínez caminó y de inmediato cometió la tercera falta ante la escapada del base “Milrayitas”, que no supo usufructuar desde la línea los foules recibidos (3 de 5).  El equipo de Rivero ingresó al último minuto con una máxima de 13 puntos, producto de un gran triple de Boccia (otra vez decisivo) y un bello doble –giro incluído- de Campazzo (27-14). Pero Regatas cerró mejor de lo esperado, con un parcial de 7-0, aprovechando dos pérdidas de los locales, un triple de Ricky Sánchez, y un Paolo Quinteros ágil para recuperar, anotar, y en otra jugada asistir a Martina. Con una renta menor a la que marcó el desarrollo, Peñarol finalizó 27-21 al frente. 

Dos minutos muy trabados y desprolijos en el arranque del segundo cuarto. Solo dos puntos de Peñarol, un Regatas fallando en la línea y protestas de los jugadores de ambos lados, con cruces entre Campazzo y Gerlero y Romano. Un triple de Sosa estiró la ventaja (32-22), pero de a poco el equipo correntino empezó a remontar la cuesta, aprovechando el descanso de los titulares peñarolenses. No fue bueno el ingreso de los relevos. La visita se puso a cinco puntos (32-27), en un buen pasaje de Hopson. Pero no pudo acercarse más porque falló mucho desde la línea (Quinteros y en especial Romano, imprecisos). 

Peñarol perdió peso en ofensiva, Weigand llegó rápido a la cuarta falta, y Rivero poco tardó en devolver a la cancha a Leo Gutiérrez y Boccia, a los cinco minutos. Y ahí, con un par de golpes, Peñarol recuperó su andar. Triple de Gutiérrez y posterior gran asistencia a Boccia para un doble (39-28). Paolo Quinteros, con 8 puntos en el parcial, fue el sostén de su equipo. También Romano, aunque lo que complicó bajo el poste no lo supo transformar con eficacia en los libres (2 de 6 lanzamientos). Para los últimos tres minutos volvió Campazzo, y el “Enano” reordenó a su equipo y provocó el desequilibrio en el “uno a uno”, en un cierre de cuarto fallido de los dos lados, abollando el aro. Peñarol se fue al descanso largo al frente por un tranquilo pero abierto 45 a 36.

El tercer cuarto tuvo a Peñarol  con un arranque liviano en defensa, que permitió una reacción de Regatas. Con un parcial de 7-2, la visita se puso a tiro (47-43, con un triple de Ricky Sánchez). Pero el elenco de Rivero salió del asedio otra vez con Leiva en el posteo y un doble de Fisher (51-45). En un juego que estaba tensionado, con varios cruces, el enérgico y molesto Casalánguida discutió con Campazzo, luego que éste cometiera una infracción. Peñarol, con un parcial de 6-0, de la mano de Leiva y un triple de Fisher, recuperó margen (57-47, en la mitad del cuarto). Con un Campazzo peleador pero en ganador,  dos triplazos consecutivos de Gutiérrez y otro muy festejado de Isaac Sosa desde un costado, con solo 3 segundos de posesión, el “Milrayitas” sacó la máxima ventaja de la noche, la cual nada hacía suponer un cierre apretado (70-55).

No fue fácil el último cuarto para Peñarol. Sufrió más de la cuenta, y su defensa permitió 36 puntos de la visita, 21 de ellos convertidos por el emblemático Paolo Quinteros (goleador de la noche con 42). Pese a que ingresó con una desventaja de quince puntos, Regatas peleó hasta el final, de la mano del maravilloso jugador del seleccionado argentino. Con un parcial de 16-1, la visita se puso 77 a 75, a falta de 4 minutos. Peñarol tuvo inconvenientes para atacar, y su rival encontró facilidades defensivas como nunca en la noche.

Pero Facundo Campazzo volvió a poner las cosas en orden. Defendiendo hasta ofenderlo a Javier Martínez, para captar rebotes, recuperar, obligar a la falta y anotar. El cordobés lideró a su equipo en el momento decisivo, cuando sus compañeros evidenciaron un bajón. A 1m51s, “Facu” clavó un triple clave para el 84-79, y luego otro para el 89-82, mientras Quinteros seguía aniquilando el aro marplatense. El cordobés, posiblemente en su último juego en el Polideportivo, tomó la posta, y facturó con eficacia las seis veces consecutivas que fue a la línea. Impecable.

Con más justeza en el marcador que lo que marcó el desarrollo del juego, Peñarol volvió a ganar. Dejó la serie 3 a 1, y tiene ahora triple chance de consagrarse por quinta vez en la Liga. El lunes, podrá cantar un sapucai glorioso en Corrientes, y su gente ya festeja de antemano. Queda toda la sensación que esta final no se le escapa por nada al "Milrayitas".

Síntesis: 

Peñarol (95): Facundo Campazzo 25, Forrest Fisher 10, Adrián Boccia 19, Leonardo Gutiérrez 15 y Martín Leiva 18 (FI);Gabriel Fernández 0, Axel Weigand 0, Isaac Sosa 6, Matías Ibarra 0. DT: Fernando Rivero.

Regatas Corrientes (91): Javier Martínez 5 (x), Paolo Quinteros 42, Nicolás Romano 11 (x), Ricardo Sánchez 11 (x) y Fernando Martina 10 (FI); Phillip Mc Hopson 7 (x), Nicolás Brussino 3, Miguel Gerlero 0, Pedro Calderón 2. DT: Nicolás Casalanguida.

Parciales: 27-21, 18-15 (45-36), 25-19 (70-55) y 25-36 (95-91).

Arbitros: Fernando Sampietro, Fabricio Vito y Oscar Britez.

Estadio: Polideportivo Islas Malvinas