River aprovechó los regalos de Boca y se quedó con el clásico

Tras un primer tiempo parejo, en el que Boca había sido apenas superior, en el complemento hizo todo mal de mitad de cancha para atrás, no pesó en ataque y River lo aprovechó, con la fórmula que le dio resultado toda la noche, presionando a la última línea y ganando dos pelotas que terminaron en gol y fueron el 2 a 0 definitivo para los de Marcelo Gallardo que festejaron un triunfo superclásico, en un Minella que explotaba en los cuatro costados. Lo único malo fue que otra vez se calentó más de la cuenta el partido y, al igual que el año pasado, hubo un cruce de manotazos entre los jugadores que no ayuda demasiado en la lucha contra la violencia.

No iba un minuto cuando el partido ya se empezó a picar. Olivera lo "atendió" a Pavón, Mina golpeó sin pelota a Centurión y todo se puso caliente de arranque. La gente entraba en calor tambien, más la de Boca, porque en la primera  infracción  de Pablo Pérez recibió la amarilla y Pitana despertó la protesta de todo el "xeneize". De juego, poco y nada, buenas intenciones de Boca de salir jugando pero con problemas desde los pies de Werner y River que se dio cuenta y lo presionó bien arriba. A los 9', se despertó el equipo de los mellizos, deliciosa asistencia Pablo Pérez, definición de Pavón y Batalla, con la punta del pie alcanzó a sacar al córner. 

Las quejas con el árbitro seguian del lado de Boca, pero además empezó a ser más en el juego, a partir de los tres volantes que le daban claridad a la salida y profundidad con Centurión y Pavón. Este último se animó con un remate desde afuera que se perdió apenas arriba. De River, poco y nada. Metió más de lo que jugó y perdió ideas, además del lateral Olivera que debió ser reemplazado a los 18'. Tuvieron que pasar 25' para que llevara peligro al arco de Werner y fue con una buena volea de Mora que se fue lejos del palo izquierdo. Pero seguía siendo más Boca y casi abre la cuenta a los 30' por partida doble: primero una contra perfecta que arrancó con un cambio de frente bárbaro y terminó con Moreira sacando con lo justo al córner, y de ese tiro de esquina, Tobio no le pudo dar dirección y la tiró apenas arriba.

El partido se volvió interesante y se hizo de ida y vuelta. El que tuvo la apertura fue River, con un centro de Martínez que cruzó todo el área, la agarró Mayada por derecha y volvió a meter para que Mora meta un cabezazo bárbaro y Werner responda aún mejor para sacar con esfuerzo la pelota al córner. Afuera estaba atractivo y adentro caliente. Se fue expulsado el entrenador de Boca por protestar y cada pelota de jugaba como si fuera la última. Al descanso se fueron en tablas, pero el "xeneize" tuvo dos chance más de concretar con Fabra y Centurión que terminaron mal y River inquieto con un remate débil de Mora desde la medialuna que se fue lejos del palo derecho de Werner y una buena acción individual que quedó en las manos del uno.

Si algo le faltó a la primera mitad, fue que al regreso del vestuario, Pitana expulsara a Gallardo y al Barros Schellotto que quedaba por llegar tarde, no se querían ir y el arranque se demoró mucho más de la cuenta. Y el complemento arrancó sin tanto ritmo, hasta que Pablo Pérez llegó al fondo por derecha y definió a las manos de Batalla, y mucho más cuando River llegó a fondo. Mora tiró el centro, Driussi la bajó, Fernandez se fue cara a cara con Werner que lo esperó bien y tapó con todo el cuerpo.

Todo lo que no podía generar por si mismo, el conjunto de Gallardo lo conseguía gracias a errores de Boca, que en su afán por salir jugando arriesgaba demás, Tobio se la dejó servida a Martínez que trasladó y sacó un derechazo que pasó cerca del ángulo izquierdo. Los defensores "xeneizes" hicieron todo lo posible para que River se pusiera en ventaja y el "millonario" lo aprovechó.  A los 20', grosero error de Peruzzi, la defensa quedó abierta, Driussi se metió al área y cuando quiso sortear a Tobio que había ido al piso, la levantó y el central la tocó con la mano. El mismo Driussi se hizo cargo de la ejecución, su remate cruzado lo adivinó Werner que la cacheteó pero no pudo evitar que entrara.  1-0 River y el Minella que explotaba con unos que festejaban y otros que buscaban levantar a su equipo.

El gol lo "mató" a Boca que no tuvo reacción anímica y le sirvió el segundo en bandeja a su clásico rival. De un pelotazo largo, intrascendente, Insaurralde falló el cálculo, Werner no pudo evitar el córner, la defensa durmió, Mina cabeceó totalmente libre, venció la resistencia del arquero.

Si Boca estaba sin repuestas,  el 2 a 0 lo terminó de liquidar. Encima, Insaurralde le pegó con mala intención a Palacios, Driussi  saltó por su compañero y recibíó un golpe de Centurión  y se armó una batalla campal entre los jugadores. Pitana, de flojisimo arbitraje, expulsó a Insaurralde y Driussi, no sancionó al ex Racing y también se fue a las duchas Benedetto por doble amarilla tras protestar.

El partido se terminó. Sólo restaba ver si River aceleraba en busca del tercero, pero Boca no tenía argumentos para inquietar a Batalla. No hubo tiempo para más, o a. Para que el "millonario" festejara adentro y afuera, se burlara de su clásico rival y espere tranquilo la reanudación del Torneo, mientras que los "xeneizes" vuelven con la incertidumbre de un equipo que tiene dos caras y la de atrás le terminó costando un clásico.