Trabajadores despedidos de Pepsico reclaman en Mar del Plata: piden no comprar los productos de la empresa

Alejandro ya lleva más de tres meses de reclamos, junto a un numeroso grupo de compañeros pide por la continuidad laboral en la empresa Pepsico, luego de que la compañía decidiera en julio pasado plantear un pedido preventivo de cierre de su fábrica en Vicente López y con eso cambiar la vida de 600 trabajadores. Con la intención de vincularse con los empleados de la firma en Mar del Plata, decenas de despedidos de la compañía llegaron hasta la ciudad para continuar con su lucha.

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“Estuvimos en el Parque Industrial, en la puerta de Pepsico. Le entregamos un petitorio a nuestros compañeros y luego nos vinimos hasta la municipalidad, cortamos un par de carriles, necesitamos que se sepa que Pepsico está incumpliendo la ley. Hay una medida cautelar que ya tiene dos meses y aunque la empresa hizo un par de maniobras para sacar al juez, la Cámara nº6 desestimó que el magistrado se salga de la causa”, describió el trabajador.

La próxima instancia de encuentro entre las partes se vivirá el viernes 6 de octubre, con una audiencia en la que los despedidos esperan que la firma “lleve alguna propuesta concreta. Exigimos que nos den los puestos de trabajo. En caso de que no sea en la planta de Florida, que existan otras opciones para que nosotros podamos evaluarlas”.

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Consultado por la posibilidad de que haya una oferta de traslado a la fábrica en General Pueyrredon, Alejandro reconoció: “Es una posibilidad, pero tenemos familias detrás de cada uno de nosotros. Por supuesto que queremos el trabajo, si habría algún ofrecimiento de ese tipo se tendrá en cuenta”, expresó.

Pepsico, al momento, ofreció una indenmización doble, del 200%. Sin embargo, según aclaró el trabajador; el pedido de cierre preventivo por crisis “fue rechazado incluso por el Ministerio de Trabajo, que no le otorgó ese permiso, ya que ninguna de las razones que planteó la empresa para cerrar una planta con 600 trabajadores se pudieron comprobar. Demostramos que el cierre es ilegal”, sentenció.

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Los inconvenientes en el conflicto se incrementaron luego de que el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, Rodolfo Daer, acordara con la firma y con el aval de la mencionada cartera laboral la desvinculación de los empleados. “El ministerio de Trabajo da lugar a ese acuerdo entre la dirigencia y la empresa. Es un doble juego, por un lado es evidente que no hay razones objetivas para el cierre, pero por otro lado habilita un acuerdo del que no participaron los trabajdores, porque la comisión interna le planteó al sindicato que no estaba de acuerdo”, concluyó.