Creciente y Los Cuerpos se presentan en el Instituto Marplatense de Música Contemporánea

Una vez más el Instituto Marplatense de Música Contemporánea abre sus puertas a un concierto circular de Creciente. Sin embargo, a diferencia de otras veces, este sábado 11 de noviembre desde las 21 en Chacabuco 3639, la ronda musical se amplía y recibe también a la formación uruguaya Los Cuerpos.

“La propuesta de tocar juntos en Mar del Plata surge de la productora Thena, a raíz de las similitudes que hay entre las bandas. No tanto por los estilos, sino más bien por el modo en que las dos formaciones nos acercamos a la canción. Ambos llegamos al tema y a la melodía en base a los rasgos identificatorio de los lugares donde habitamos. Ambos tenemos muchos rasgos locales: ellos más candomberos y nosotros más marinos”, explicó Leo Juanes, guitarrista de Creciente y creador del ritmo “Mareo”.

Para quienes aún no los conocen, Los Cuerpos es una formación oriunda de Montevideo, que fusiona en sus canciones el jazz, el candombe y algunos elementos de la canción popular uruguaya. Su carrera inicia en 2011 y la realización de su primer disco - “Hombre Vela”- data de 2012. De la presentación oficial del material de estudio participaron, entre otros, Martín Buscaglia, Juan Pablo Chapital y Fernando Pomo Vera.

Como explican sus integrantes -Hernán Peyrou, Pablo Peyrou, Sebastián Delgado, Santiago “Coby” Acosta y Mateo Ottonello- la propuesta musical es variada en cuanto a la dinámica y a los matices que presentan sus canciones, que intentan plasmar la identidad uruguaya contemporánea y expresar la propia naturaleza de la banda, al mismo tiempo que alcanza una alta elaboración en cuanto a los arreglos, las composiciones y las letras.

Por su parte, Creciente es una banda marplatense integrada por Ingrid Bretschneider, Leo Juanes, Facundo Passeri, Sebastián Sartal y Esteban Giménez. Nace de la búsqueda de un lenguaje que refleje la Costa Atlántica, su vida cotidiana y sus paisajes.

De la mano de ese objetivo fue que nació el “Mareo”, un ritmo inspirado en los movimientos del mar; del barco al navegar; del surfista esperando la ola; de las algas que danzan y no oponen resistencia al son del agua. Con ese “Mareo” surgió además un Tambor Oceánico, que es un instrumento inédito capaz de recrear el sonido del mar junto a otros acústicos que se mueven sobre la rítmica de las mareas.