Oscar Delarroca: "Era un clásico hermoso"

Goleador implacable de Aldosivi entre 1989 y 1994 y verdugo de su rival, Oscar Delarroca era el entrenador del "Tiburón" en el último clásico con Alvarado. Ante 0223, recordó lo sucedido ese día de hace 20 años.

Oscar Delarroca en 1992, siendo pleno jugador de Aldosivi (Foto: facebook).

10 de Agosto de 2017 04:13

Por Redacción 0223

PARA 0223

Oscar Delarroca es sinónimo de gol en Aldosivi. Un referente ineludible de una etapa fructífera del elenco del puerto. Con una trayectoria que comenzó en Rosario Central y que pasó por Banfield de Buenos Aires, Tigre, Estudiantes de Caseros además de varios equipos de Mar del Plata, finalizó su carrera en el "Tiburón" con la cuota goleadora que lo caracterizó. Fue "verdugo" de Alvarado en varias ocasiones. Pero hace 20 años, era el entrenador de Aldosivi en aquel último clásico jugado en cancha de River.

En diálogo con 0223, el exdelantero recordó: "Fue un desastre...me acuerdo perfectamente. Di Salvo (árbitro) dijo que lo suspendía y después dio marcha atrás. Y nos dieron el partido por perdido. Aldosivi no se quiso retirar. No estaban dadas las garantías. Le dije que no podía arriesgar a los chicos, que tenían entre 17 y 18 años. No se hizo responsable de la situación entonces decidimos no salira jugar", rememoró.

Delarroca dejó en claro que lo vivido en esa tarde de gases lacrimógenos y piedras, fue grave: "entramos a la cancha con un policía, que se paró delante del banco de suplentes de Alvarado, y un tipo desde arriba le tira un pedazo de mampostería en la cabeza. Todos nos corrimos para la mitad de la cancha. Se lo llevaron muy lastimado. Nos llamó el árbitro y dijo ´vamos a jugar´. Y se armó una pedrada...", contó. 

"Cuando salimos del vestuario, nos subimos a un micro y nos ubicamos con los bolsos contra los vidrios debajo de los asientos. El policía agredido fue quien nos logró sacar de ahí. Yo le dije ´¿qué hacés acá todo lastimado, estás loco?´. ´Vamos, vamos que los saco...´. Fue demencial", aseveró el por entonces director técnico.

Delarroca discute con Javier Pizzo, lateral de Alvarado, y ante el árbitro Di Salvo (Foto: Diario El Atlántico - gentileza Darío Aranda).

Todos coinciden que el clásico había llegado a un punto de quiebre. Delarroca graficó con un ejemplo situaciones que marcaban la gravedad: "No se podía jugar más. Se desmadró todo. Fue una época difícil. También era complicado ser jugador. Yo vivía en Gascón y Pampa, medio barrio de Alvarado, y dos por tres llegaba a mi casa y me tenía que meter corriendo porque se bajaban dos tipos de un auto que me querían cagar a trompadas...era la realidad. Encima, para colmo, tuve la suerte de hacerles goles y eso influía en la bronca que me tenían", expresó. Y agregó: "Una lástima, porque por el folcklore lindo del fútbol, sería hermoso que se juegue. Los dos tienen una barriada atrás como para generar buenas situaciones dentro de la cancha. Pero no de lo malo, se ha golpeado gente. Una vez al querido Cubilla (reconocido hincha y colaborador del club), que era un pan de Dios y solo llevaba su bandera, como no la quiso soltar lo agarraron en el Mundialista y le pegaron...".

Con cierta nostalgia, quien fue campeón invicto de 1993 en el torneo local declaró a 0223: "Era un clásico hermoso, con una linda rivalidad. A mí me encantaba jugar contra Alvarado y a ellos también contra nosotros. Era jugar con la cancha llena, y nadie se lo quería perder".

Oscar Delarroca dirigió a Aldosivi por primera vez en 1995 (Torneo Argentino "A") y volvería en 1997: "Dejé de jugar y al año siguiente dirigí el primer Torneo Argentino. Y en el ´97 era el entrenador de todas las categorías locales, y el ´Gato´ Daniele estaba en la B Nacional. Hicimos una campaña muy linda, debutó el ´Taca´ Bernaola con 15 años recuerdo."

El hoy comerciante y exdirector técnico de las inferiores en el Proyección Juvenil recordó cuál es el clásico que guarda como mejor recuerdo: "Fueron unos cuantos partidos. Pero me quedo con el que ganamos en el Mundialista 2 a 0, con dos goles míos, pero fue con el equipo de 1993 con Osvaldo Rizzo, Gustavo Giustozzi, Pablo Piro, Marcelo Ríos, Pablo Corti, un equipo bárbaro que tenía muchos jóvenes. Recuerdo ese partido porque fue el puntapié inicial para ganar el torneo y lo hicimos con mucha categoría ante un gran Alvarado", cerró.