Falleció Carlos Montenegro, entrenador referente del fútbol local

El fútbol de Mar del Plata llora a uno de sus referentes. Carlos Alberto Montenegro, exfutbolista y exitoso director técnico, falleció este lunes a los 65 años, tras una dura enfermedad.

Su carrera como futbolista comenzó en Vélez Sarsfield en 1971.  Y en ese año se dio el lujo de integrar y ser campeón con la Selección Argentina de fútbol de los Juegos Panamericanos de 1971, en Cali, con Juan José Pizzutti de entrenador. Luego continuó en Argentinos Juniors (1973), Quilmes, Once Caldas y Unión Magdalena de Colombia, Cipolletti de Río Negro, Estudiantes de La Plata (1978), Ramón Santamarina de Tandil, Gimnasia de Jujuy, Central Norte de Salta (1982), Atlético Mar del Plata y Circulo Deportivo de Comandante Nicanor Otamendi.

Justamente en el "Papero" comenzó su exitosa carrera como entrenador, tras haber sido campeón como jugador en 1984 y disputar el Nacional de 1985, último representante del fútbol marplatense en primera hasta el ascenso de Aldosivi.

Jugador y entrenador con Círculo Deportivo.

En 1987 llegó a Deportivo Norte, donde tuvo tal vez su más destacad actuación: bicampeón de la Liga Marplatense entre 1987 y 1988, logrando el derecho de afrontar el Torneo del Interior de 1989. Allí, el elenco de La Perla llegó a los cuartos de final del certamen, siendo eliminado por Nueva Chicago en una apasionante definición en el estadio José María Minella, en un plantel integrado por Carlos Miori (entre otras figuras localeS) y al principio por un jóven Alejandro Giuntini. Una campaña que fue histórica, que tuvo el apoyo del hincha local.

Montenegro luego llegó a Aldosivi y también fue campeón en 1989. Al año siguiente, en Alvarado también conquistó el título. Dirigió a River, Círculo, y en 1998 fue campeón con Atlético Mar del Plata, club donde había sido jugador. 

"El Jefe", como lo apodaban, dejó un grato recuerdo en sus dirigidos y compañeros por su hombría de bien, su sabiduría y respeto con que se manejaba. Un referente del fútbol marplatense que dice adiós, dejando una huella en la historia vernácula.