Con una lluvia de goles, River deliró en el Monumental

El equipo de Marcelo Gallardo nunca sacó el pie del acelerador y le dio una clase de fútbol y contundencia al Jorge Wilsterman, lo aplastó por 8 a 0 y se metió en las semis de Libertadores. 

Uno de los tantos festejos de River. El equipo de Gallardo se floreó ante un rival que no justificó su presencia en esta instancia. (Foto: NA)

21 de Septiembre de 2017 22:39

Por Redacción 0223

PARA 0223

La noche soñada para River que, con la lluvia que cayó en Capital Federal, le puso un marco todavía más apoteótico. Que el rival haya sido endeble y que en ningún momento le pudo hacer frente, no opaca que los "millonarios" revirtieron el 0-3 que habían recibido en Bolivia y le dieron una "paliza" histórica a Jorge Wilsterman por 8 a 0, con cinco goles de Ignacio Scocco, para sacar el pasaje a la semifinal de la Copa Libertadores, donde se enfrentará ante San Lorenzo o Lanús.

No hubo equivalencias. No hubo partido. Hubo un equipo que salió con todo desde el primer minuto, ante otro que fue invitado a una fiesta y fue un partenaire, que hizo todo mal, se apuró, cometió groseros errores en el fondo que facilitaron la tarea de los de Gallardo que hizo valer la diferencia de jerarquía para disfrutar ante su gente. Poco se puede analizar de un encuentro que en 20' ya estaba 3 a 0 y con la serie igualada. A esa altura, si bien un gol de Wilsterman podía complicar el panorama, lo que había que saber era cuántos goles iba a hacer River en la noche.

El cuarto de Enzo Pérez antes de ir al descanso, desbarrancó cualquier tipo de ilusión de los bolivianos de llegar a un gol que lo devuelva a tomar la delantera en la serie. Pero no sólo eso, sino que el quinto que llegó cuando apenas habían pasado cuarenta segundos del complemento, terminó de liquidar la historia. 

El resto, como habíamos anticipado, era saber a cuántos llegaría River. En ningún momento tuvo participación Germán Lux y lo de River fue deluxe, para destacar, pero sin obviar que su rival nunca le opuso resistencia, lo dejó hacer a su antojo y, en ese contexto, el "millonario" no desaprovechó ninguna chance y lo aplastó. Fernández tuvo el premio a un muy buen partido y el volante de la Selección decoró el resulado con una corrida memorable, de área a área, tras una pelota parada rival, para que la fiesta sea completa en un Monumental que comentó con la ansiedad lógica de lo que había sido la derrota en la idea y rápidamente recobró la tranquilidad para que después el disfrute sea total.

Ahora se vendrá San Lorenzo o Lanús (jugaban al cierre de la edición), pero esa será otra historia. River hizo lo que tenía que hacer y aplastó a un rival muy inferior. Sin tinte de milagro ni hazaña, el golpe de quedar eliminado ante Jorge Wilsterman hubiera sido muy difícil de asimilar.
 

Temas