Tras la lamentable comparación con “perritos”, crean un programa para gente en situación de calle

Seis meses después de que el polémico secretario de Salud Gustavo Blanco comparara a los indigentes con los perros, el ejecutivo municipal creó un Programa de Atención Integral a Personas en Situación de Calle que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida y brindar asistencia social, sanitaria, psicológica y jurídica a todos aquellos que lo necesiten.

En julio del año pasado, Blanco se refirió a una persona en situación de calle: "Hemos ido 17 veces a buscarla. La dejamos en el hospital y vuelve. Como un perrito, vuelve al lugar donde se siente cómoda".

Esas declaraciones generaron el repudio de gran parte de la sociedad y del arco político, incluso de la gobernadora María Eugenia Vidal que consideró que eran "inaceptables".

Durante el invierno pasado, murieron tres personas en situación de calle en Mar del Plata en distintas circunstancias. Con el calor del verano, el ejecutivo parece haber recapacitado sobre la gravedad de esta problemática.

La exconcejal Leticia González, quien hasta el momento ocupaba un cargo de planta permanente en el área de Desarrollo Social, será quien estará al frente del Programa de Atención Integral a Personas en Situación de Calle.

El programa tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas en situación de calle promoviendo su plena integración social, así como también brindar asistencia social, sanitaria, psicológica, y jurídica.

Además, el área que comandará González recepcionará denuncias, realizará un padrón y deberá hacer un seguimiento de las personas en situación de calle hasta que alcancen el mayor nivel de resinserción social posible.

A través del programa, el municipio deberá promover espacios de alojamiento temporario, redefinir la modalidad de intervención de la problemática, ampliar el alcance de las mismas y desarrollar estrategias de comunicación que informen a la comunidad sobre las acciones a seguir en caso de identificar a personas en condición de vulnerabilidad por su permanencia de vida en calle.