Autorizan a genocida condenado a veranear en La Costa: el intendente De Jesús lo declaró persona no grata

A la noticia conocida sobre el final del 2017 respecto al permiso de prisión domiciliaria otorgada al genocida Miguel Etchecolatz para que viva en Mar del Plata, en las últimas horas se conoció otra noticia polémica con el aval de la justicia para que Norberto Atilio Bianco pueda veranear en la localidad de Mar de Ajó.

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Blanco fue el exjefe de la Maternidad Clandestina del hospital militar de Campo de Mayo y fue condenado por apropiación de niños nacidos en cautiverio durante la dictadura cívico-ecleciástica-militar de fines de la década del 70 y principios de los 80.

Conocida la noticia, el intendente del partido de La Costa, Juan Pablo de Jesús, firmó un decreto en el que lo declara “persona no grata en todo el ámbito del distrito”, además de expresar el más enérgico repudio a su presencia en la zona.

La normativa fue firmada también por el secretario de Turismo del partido, ante “el carácter aberrante de los crímenes por los que fue condenado, entendiendo que los mismos ofenden a todos los argentinos y a quienes vivimos en el partido de La Costa, como así también a todos los veraneantes que nos eligen, año a año, como destinos turísticos para descansar en familia” consideraron desde el Ejecutivo costero.

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Para De Jesús, “la anunciada llegada del apropiador al partido de La Costa resulta un hecho de enorme gravedad institucional y social, afecta a nuestros vecinos, alterando el orden público y la moral y quebrantando la paz y armonía que gozamos en nuestras ciudades balnearias”.

La historia de las secuelas de la dictadura en el distrito son fuertes, con la aparición en las playas de los cuerpos relacionados a los denominados “Vuelos de la Muerte”. Asimismo, en el primer juicio por partos clandestinos en Campo de Mayo, Norberto Atilio Bianco fue condenado a 13 años de prisión por sustracción, retención y ocultamiento de menores en los casos de Francisco Madariaga Quintela y del hijo de Valeria Beláustegui Herrera, y por los secuestros y tormentos de ambas madres.