Cuentas claras conservan la amistad, lo mejicanearon y el Concejo sigue de vacaciones

9 de Enero de 2018 17:55

Por Redacción 0223

PARA 0223

Una novela de enredos

El desembarco del secretario de Hacienda Hernán Mourelle a Mar del Plata causó un fuerte revuelo en el ambiente político de Mar del Plata, porque todo indicaba que se trataba de una nueva intervención del gobierno provincial a la gestión de Carlos Arroyo por la cercanía del flamante funcionario con el ministro de Economía Hernán Lacunza.

Primero dio pasos firmes, con fuerte respaldo del intendente y también del gobierno provincial que celebraban la llegada de un técnico que se hiciera cargo de los números. 

Sin embargo, poco a poco comenzaron los traspiés. Primero fue la quita de la exención impositiva a los teatros. Y luego dos medidas que se presentaron como favorables, pero luego la justicia las revirtió: el no pago de sueldos a la cúpula del STM y la multa millonaria a la empresa 9 de Julio.  

La situación se agravó en medio del conflicto con la empresa Tecsan. Desde el entorno del intendente aseguraban que buena parte de la decisión de ir a fondo contra la firma que opera dentro del predio se debió a los desmanejos que detectó Mourelle.

“Nosotros pensábamos que tenía más banca de provincia. Estamos sorprendidos”, señalaron desde el círculo íntimo de Arroyo. Sin embargo, desde el entorno de Mourelle ratificaron que el desembarco del secretario de Hacienda responde a órdenes directas de Lacunza más allá de las desavenencias de los últimos días. 

“Recibimos de todos lados, pero nosotros llegamos para hacer una tarea técnica, no política. Y sabemos que éste es el rumbo pese a los cambios de los últimos días”, explicaron a este medio. 

Y encima internas

En medio de las desautorizaciones que sufrió Mourelle por parte de la propia gobernadora Vidal que mandó a solucionar los conflictos con los teatros y la basura, el secretario de Hacienda estalló el domingo cuando leyó el comunicado oficial del municipio durante la presentación del fútbol de verano.

Es que el secretario de Gobierno Alejandro Vicente fue en representación del intendente Arroyo y pareció adjudicarse el éxito de las negociaciones con la empresa organizadora que le permitieron a la comuna cerrar un contrato beneficioso como nunca antes.

“Esa fue toda nuestra. Fue Mourelle el que se sentó a pelear la plata”, dijeron desde su entorno. 

El acuerdo negociado totaliza entre dinero y obras los 700 mil pesos por partido (5.6 millones por los 8 encuentros). Más del triple del mejor acuerdo logrado en la historia del torneo. Permitirá obras de mejora en el estadio como renovación de 800 butacas, pintura a nuevo de los accesos, acondicionamiento de los baños y mejora en la iluminación. 

También la empresa realizará una puesta a punto del campo de juego, que servirá durante el año para el uso de los equipos marplatenses. “Las mejoras en el confort del estadio son para atraer el retorno de las familias al estadio y lograr eventos de fútbol también en el invierno”, explicaron.

Bajarle un poco el tono

En medio de todas estas cuestiones, desde el gobierno bonaerense reconocieron los pasos en falso de Mourelle, especialmente con el tema de la basura. Aunque también aclararon que el funcionario llegó para resolver los números y que las definiciones tomadas tienen un trasfondo político. “En definitiva es el intendente. ¿A quién se le ocurre finalizar el contrato de la basura el 3 de enero?”, se preguntaron. 

A partir de ahora buscarán profundizar el perfil técnico de Mourelle para no exponerlo. “No ayuda mucho que tire frases como ‘Los Empresarios de teatros son millonarios’ o ‘Se robaron 30 jardines’, pero ya lo vamos a acomodar”, dijeron.

Y el laburo para cuándo

El Concejo Deliberante sigue paralizado y el acuerdo para definir las comisiones no parece cerca.

La oposición apunta al desgaste y la necesidad del oficialismo de comenzar el tratamiento del presupuesto y la fiscal Impositiva. A partir de eso, espera obtener el manejo de sectores clave.

“La cosa viene difícil, pero si seguimos así podemos resolverlo a las apuradas y ahí van a salir perdiendo más”, advierten. ¿Cuál será la opción?.