Nación se adelantó en la final de ida

Los "bichos azules" fueron más que General Urquiza aún con un hombre menos durante más de un tiempo, tenían todo controlado con un 2 a 0, pero los de Di Fonzo llegaron al descuento y quedó todo abierto para la revancha. 

8 de Diciembre de 2018 19:37

Por Redacción 0223

PARA 0223

Fue una final y se jugó como tal. Con situaciones de gol, por momentos muy hablado, con algunas polémicas y con un ganador merecido que fue Nación, que tuvo todo para quedarse con una ventaja mayor pero una pelota aislada le dio el descuento a Urquiza, selló el 2 a 1 definitivo y dejó un panorama indescifrable de cara a la revancha en cancha de River. Lo más positivo para los de Luis Machado es que pudieron sacar ventaja y que lo hicieron jugando 55 minutos con un hombre menos por la expulsión de Manuel Sosa.

El que pensaba que iba a salir un encuentro cerrado y sin espacios, se equivocó. Porque al haber dejado en el camino a los, a priori, candidatos, Nación y Urquiza ya no iban de punto a la final, sino que los dos tenían obligaciones y las tomaron como corresponde. Por supuesto, al ser local, los que más lo hicieron en la ida, fueron los "bichos azules", que pese a la ausencia de Agustín Jerez se las ingeniaron para inquietar con las constantes corridas de Ogas, la llegada por sorpresa de Sosa, el mano a mano de Machado, apoyados en el trabajo de la defensa y la recuperación de la pelota de Cristian Ponce (la figura de la tarde) y Faguaga. Si bien las situaciones de peligro no abundaron, el gol merodeaba el área de Lalosevich y a los 36', luego de un córner desde la derecha, Matías Sosa anticipó a todos y punteó al gol para darle una justa ventaja al dueño de casa. Cuando todo era alegría en la poblada platea del "Mario Della Torre", Campagnoli vio que Manuel Sosa levantó la pierna después de un rechazo y lo mandó a las duchas para ponerle más dramatismo a un juego que, a esa altura, ya estaba muy conversado y luchado.

A la vuelta de los vestuarios, Urquiza intentó adelantarse aprovechando el hombre de más, pero Nación mostró que también tenía argumentos para defender sin meterse atrás, los dos volantes centrales seguían siendo los dueños del partido y, cuando podía, apostaba a la velocidad de Ogas para desequilibrar. Y así llegó al segundo. El escurridizo delantero ganó por derecha ante un pase largo, fue mano a mano contra Gaitán y esperó la subida de Machado por el otro lado para cambiar de frente, el "11" controló de manera perfecta hacia adelante para impedir la llegada de algún defensor, dejó en ridículo al arquero con una gambeta y empujó de zurda para el 2 a 0: ¡golazo! 

Dos goles de ventaja, con 10, parecía un negocio redondo para Nación que se fue quedando sin piernas para ir por otro gol. Pero no se preocupaba, porque Urquiza no tenía argumentos para lastimarlo, más allá de que Di Fonzo movió el banco buscando respuestas que no encontraba en el campo de juego. Pero lo que no podía lograr con fútbol elaborado, llegó en una pelota parada. Un córner de Grande pasó de largo, Colaneri no pudo bajarla bien pero salió atrás para un compañero, volvieron a meter la pelota al área, hubo una serie de rebotes y le quedó servida a Raúl Melga que le rompió el arco a Vecchiarelli que nada pudo hacer. El "tricolor" fue con el envión en el último tramo, pero no inquietó más de la cuenta, el ingreso de Franco Ponce le dio la última a Nación, pero el calor ya se hacía sentir y no hubo tiempo para más. Se adelantó el equipo de Luis Machado en la final de ida y está a 90 minutos de salir campeón después de 66 años. Tiene esos mismos 90 el club de la calle Tucumán para revertir la historia y volver a festejar como lo hizo por última vez en 2014.