Mantienen la pena en suspenso para la policía que mató a un hombre por error

La causa fue recalificada tras una resolución del Tribunal de Casación. Griselda Guanca fue condenada a dos años en suspenso. En marzo de 2015 le disparó a la víctima en la terraza de su casa.

El primer juicio se realizó en noviembre de 2016. (Foto: archivo 0223).

16 de Julio de 2018 08:13

Por Redacción 0223

PARA 0223

A partir de una resolución de Casación, el Tribunal Oral en lo Criminal 3 recalificó el hecho por el que fue condenada una policía que en marzo de 2015 mató por error a un hombre en su vivienda como homicidio agravado por el uso de arma de fuego ejecutado bajo un error en la causa de justificación. Los magistrados resolvieron mantener el monto de la pena en dos años de prisión en suspenso y una inhabilitación de seis para poseer o portar armas de fuego.

Griselda Patricia Guanca había sido condenada en noviembre de 2016 por el mismo Tribunal que en esta ocasión mantuvo una serie de normas de conducta para mantener la pena en suspenso: deberá someterse al control del Patronato de Liberados, mantener el domicilio, continuar con su tratamiento psicológico y con el curso de capacitación laboral que lleva adelante.

Los jueves Mariana Irianni, Fabipan Riquert y Juan Manuel Sueyro resolvieron el reenvío dispuesto por la Sala V del Tribunal de Casación Penal, recalificaron el hecho  y mantuvieron los montos de pena que dictaron en noviembre de 2016.

El hecho

El 20 de marzo de 2015, Griselda Guanca acudió al llamado de un hombre que denunció el robo de la vivienda de su madre, en el Puerto. La policía subió a la terraza y vio una sombra: pensó que uno de los delincuentes todavía seguía en el lugar. Disparó. Allí estaba Miguel Efisio (41), justamente el hombre que había llamado a la policía, quien cayó muerto.

En ese fallo dividido los magistrados descartaron cuestiones eximentes y agravantes, pero consideraron como atenuantes la historia de vida de la imputada, el desamparo por parte de la Policía Bonaerense en el entrenamiento y capacitación de su personal, la falta de antecedentes y el arrepentimiento que de manera evidente notaron a lo largo de todo el debate.

En sintonía con los planteos -con distintos matices- que las partes realizaron en los alegatos, el Tribunal cuestionó fuertemente la formación que tienen los oficiales de la fuerza. Citando los testimonios de Guanca, sus compañeros y de instructores que pasaron durante el juicio, sostuvieron que la imputada "no se aprovechó de su condición de policía" y que por la deficiente instrucción recibida y el poco tiempo que tenía en la calle "no debía haber estado al frente de una patrulla".