Bronca de padres y docentes por el “deplorable” estado de la Secundaria 19

Hay mucha bronca en la comunidad educativa de la Secundaria 19 ante los distintos problemas de infraestructura que padecen sus estudiantes: aulas con goteras, instalaciones de gas defectuosas, paredes con moho y un escaso servicio alimentario. Ante esta situación, esta mañana cortaron durante unos minutos el tránsito sobre la avenida 39 y Cuba para visibilizar el reclamo.

“Cuando volvimos de las vacaciones de invierno nos encontramos con la desagradable sorpresa que el nuevo servicio de comedor había cambiado y venía de Buenos Aires. El cupo sigue siendo de 141 alimentos pero ahora son envasados. Ya no es más un panadero que podíamos arreglar y traer para 350.  Así que ahora son 141 alfajores, 141 frutas. En unos días se termina un remanente y estamos preocupados. Los chicos más grandes han decidido en reunión  cederles el desayuno a los más chicos para que alcancen las 141 raciones”, explicó a 0223, Ester, la cocinera de la EES 19.

A su lado Sebastián Campanelli, papa de un alumno e integrante de la cooperadora, sostuvo que las condiciones de la escuela en infraestructura “son deplorables”.

“Algunos salones están llenos de agua, humedad por todos lados, moho y conexiones de gas en mal estado. Los chicos piden lo básico, sólo quieren estudiar y comer algo”, lamentó el hombre, que contextualizó la penosa situación con la escuela 50 y el Jardín 922, “que forman parte de este barrio y que tienen además sus calles rotas, sin luz y en un total estado de abandono”.

“Bañera pública”, el cartel que da la bienvenida a un aula de la EES 19

En la entrada de una de las aulas, un improvisado cartel puesto sobre una botella de gaseosa, advierte ingeniosamente a extraños la presencia de una “bañera pública”.

“Los docentes se han organizado durante todo este tiempo para que la escuela funcione pero esto no da para más. Podemos hacer un listado de 30 temas que están mal, que se pueden ver a simple vista. Desde un pozo ciego que no está bien cerrado y se puede caer un nene hasta los docentes de orientación escolar que hacen un laburo bárbaro y que podrían perder su trabajo”, reclamó Luciano, docente del colegio.

En tal sentido, el profesor razonó: “Cuando hay que dividir en cuatro un alfajor y un té, así no se puede. La calidad educativa pasa por un montón de cosas. Es un tema de dignidad. El Consejo Escolar con intervención o sin intervención, no dan respuestas. Y si hay recursos, se los llevan a otra escuela”, cerró.