Adiós a Hugo Ibarguren, primer campeón mundial de patín

El ambiente deportivo marplatense despide por estas horas a una gloria: Hugo Reynaldo Ibarguren. A los 77 años, el primer campeón mundial de patín falleció en su Necochea natal, luego de haber vivido durante décadas en Mar del Plata. Sus restos son velados en el Concejo Deliberante del vecino partido.

Ibarguren fue un pionero. El que abrió el camino de la gloria para un deporte arraigado a esta ciudad, y que luego tuvo más exponentes a nivel mundial como Claudia Rodríguez, Nora Alicia Vega, Andrea González y Silvina Posada.

Nacido el 25 de enero de 1941, a sus 8 años el niño Ibarguren le escribió al entonces Presidente de la Nación, Juan Domingo Perón, una carta para solicitarle un par de patines nuevos, luego de haber obtenido el campeonato marplatense del ´49. Por entonces era alumno del Colegio Don Bosco. Y poco tiempo después, llegó la gran respuesta del mandatario: los patines y un texto donde lo motivaba a seguir practicando su deporte. 

Desde los 10 años, representó al club de su vida, General Mitre de Mar del Plata. Fue campeón local, argentino Sudamericano, rioplatense en todas las categorías (infantiles, menores, cadetes, juveniles y mayores). Y entre 1956 y 1959, se consagró campeón nacional de mayores en San Juan, Buenos Aires y Mar del Plata. 

Para la década del ´60, su talento dio el salto a Europa. En 1962 representó a Argentina en el Mundial desarrollado en Venecia, Italia, en un viaje costeado a puro trabajo con sus compañeros de equipo. Fue cuarto. Dos años después, fue segundo en el Mundial de España. 

Ibarguren, reconocido por el HCD de General Pueyrredón en 2014, junto a Nora Vega -excampeona mundial de patín- y el concejal Ariel Ciano.

El punto más alto de su carrera llegó el 4 de julio de 1965, fecha histórica para el patín nacional. En la Ciudad de Wetteren- Bélgica, Ibarguren fue la figura destacada del Mundial, logrando ser el primer americano en conseguir el Titulo Mundial de 10.000 metros y el Subcampeonato Mundial de 1.000 metros. En esta oportunidad, sus compañeros Raúl Scafati y Manuel Narciande, bajo la dirección del periodista Miguel Alfieri, lograron muy buenos resultados, posicionándose así Argentina como una nueva potencia en este deporte. 

Como una vuelta del destino, tras la consagración viajó a Madrid, a la residencia de "Puerta de Hierro" para entrevistarse con el exiliado expresidente de la Nación Juan Domingo Perón. Allí, le dedicó el triunfo y le agradeció por ese par de patines que le había regalado 16 años atrás cuando comenzaba en el deporte. El General le entregó una billetera de cuero con su nombre grabado. 

Ya en 1966, el campeón compitió en el Mundial realizado en las calles de Mar del Plata para consagrarse en los 10.000 metros a la Americana. También allí triunfaron Raúl Scafati en 1.000 mts., Luis Rafaldi en 5.000 mts., y Manuel Narciande en los 10.000 mts. 

Como atleta, también se desempeñó como especialista en las siguientes categorías: Velocista, Medio Fondista y Fondista. Asimismo, ganó pruebas como las "3 horas a la Americana" en la ciudad de Montevideo (Uruguay), las "12 horas a la Americana", en el Piso de los Deportes de Mar del Plata, la prueba interciudades "Dionisia-Mar del Plata" y los "40 Kilómetros en Montevideo, Uruguay”. 

Durante los 30 años que abarcó su carrera deportiva, además de la especialidad de Patín Carrera, integró los equipos de Hockey sobre patines en Segunda y Primera de los Clubes Deportivo Español (Capital Federal) y Kimberley (Mar del Plata), con los cuales logró ser campeón en varias oportunidades. 

Cuando abandonó la práctica activa del deporte, se dedicó de lleno a ser entrenador, logrando que varios de sus alumnos fueran campeones argentinos y, uno de ellos, Raúl Scafati, campeón mundial nuevamente en los 10.000 mts. También fue dirigente del Club Atlético Quilmes y de la Confederación Argentina de Patín Carrera, entidad que proclamó al 4 de julio -fecha del primer título mundial - como "Día del Patín Argentino".

En sus últimos años, trabajó para el CEICED (Centro de Estudios pata la Investigación Cultural, Educativa y Deportiva) de la ciudad de Necochea, donde también fundó su Escuela de patín con enorme pasión y dedicación a los jóvenes. 

En 2015, a 50 años del título conseguido, el Honorable Concejo Delibertante de General Pueyrredón lo homenajeó. Y Necochea lo nombró en abril pasado "Hijo Dilecto". Fue el último reconocimiento de tantos para una figura gigante de su deporte.