La Copa Argentina metió la cola y el Pentagonal se extiende una semana

Como era de esperarse, luego de que se conociera que Boca y Estudiantes de Río Cuarto podrían jugar el 19 de abril en Mar del Plata, el Consejo Federal cambió las fechas y la última se corrió al 28 de ese mes.

20 de Marzo de 2019 11:52

Por Redacción 0223

PARA 0223

Desde hace un tiempo a esta parte, la Copa Argentina, así como cobró importancia a nivel nacional por dar un pasaje a la Copa Libertadores y los equipos “grandes” le dieron mayor valor, ese motivo hizo que esos mismos clubes empiecen a digitar cuándo y dónde quieren jugar, la organización les dio lugar y, los principales perjudicados son los equipos del ascenso, sobre todo los del interior. Por eso,  no sorprende pero molesta, que por la disputa de un encuentro entre Boca Juniors y Estudiantes de Río Cuarto, programado ahora, se tenga que modificar la fecha de la última jornada del Pentagonal Final del Federal A, y extender una semana más la modificación.

La situación es la siguiente: Boca fue estirando la fecha de debut en los 32avos de final de la Copa Argentina y le sentó bárbaro el 19 de abril, teniendo en cuenta que ya habrá finalizado su participación en la Superliga y recién cinco días más tarde viajará a Colombia para enfrentar a Tolima. Lo que no tuvieron en cuenta los de Torneos, es que ese fin de semana se jugaba la última fecha del Pentagonal Final y el rival del “xeneize”, Estudiantes de Río Cuarto, estará ahí definiendo el primer ascenso a la B Nacional. Sin embargo, no les preocupó, en vez de correr un solo partido, movieron toda la jornada (programada con anterioridad) para una semana más tarde y habrá que esperar hasta el 28 de abril para conocer al campeón del Federal A.

¿En qué lugar entra Mar del Plata? En que está involucrado Alvarado, que ya había organizado el trabajo hasta el 21 de abril y deberá reacomodarlo. Pero no sólo eso, el “torito” disputará 3 partidos en una semana (sábado 6, miércoles 10 y domingo 14) y luego tendrá que aguardar 14 días para cerrar la fase. En caso de tener chances de lograr el ascenso, serán dos semanas de ansiedad pura, difícil de manejar para el grupo y la gente. Además, la fecha entresemana que se puso para acortar las fechas, pierde sentido y lo único que hace es perjudicar, entre otros, a los de Mauricio Giganti, que jugarán un miércoles en nuestra ciudad y cuatro días más tarde se tendrá que presentar en la lejana Resistencia (1350 kilómetros).

En síntesis, otra vez la Copa Argentina muestra un desinterés por los equipos de menor renombre, que no sólo tienen que jugar mayor cantidad de fases, sino que cuando llega el turno de enfrentarse a los de Primera División, en lo que deberían ser hechos históricos, tienen que lidiar con la fecha y la sede en la que los programan, son subestimados e invitados a una fiesta que en muchos casos les es ajena.