Peñarol y una victoria que alimenta la ilusión

Con una actuación contundente y sin fisuras frente a Boca, el "milrayitas" se impuso por 82 a 63 y se sigue alejando del fondo de la tabla de posiciones. Además, escaló otro puesto y sueña con los playoffs.

Charles Hinkle trajo soluciones en Peñarol. De gran trabajo en Córdoba, volvió a ser determinante en el triunfo sobre Boca en el Poli. (Foto: Diego Berrutti)

21 de Abril de 2019 22:27

Por Redacción 0223

PARA 0223

La cabeza, muchas veces, es más importante que lo deportivo. Peñarol pasó por momentos donde la presión se lo devoró y lo llevó a dejar puntos claves en el camino. De hace unos días a esta parte, se ve otro semblante, los triunfos en la ruta sobre Libertad de Sunchales y, principalmente, ante Atenas en Córdoba, le cambiaron el chip a los de Leo Gutiérrez que, en la vuelta al Polideportivo, mostró una versión mejorada, venció claramente a Boca Juniors por 82 a 63, se aleja de la lucha por la permanencia y se ilusiona con el último lugar para los playoffs.

El local empezó con buenas gestiones defensivas que no pudo traducir en puntos adelante para poder establecer una diferencia de arranque. Lo de Boca tampoco fue muy lúcido, por eso el marcador estaba empatado en 4 llegando a la mitad del primer segmento. Luego afinó su ataque el "Milrayitas", contó con el goleo de Hinkle y Austin y pudo meter un 11-2 para alejarse 15-6 obligando a Guillermo Narvarte a pedir tiempo muerto. En la parte final, el buen andar del local continuó, con buen aporte de los relevos y un sobresaliente Austin (10) para sacar 12 al sonar la chicharra (24-12).

En el segundo se repitió la historia. Hasta los cinco minutos, Peñarol defendió bien pero careció de claridad y efectividad en ataque, por eso no pudo quebrarlo. Y cuando Boca calibró la mira, se arrimó peligrosamente (27-22). Allí el que detuvo las acciones fue Leonardo Gutiérrez. Al volver, Hinkle apareció con una bomba tranquilizadora y luego de un doble más falta sobre Vaulet, se despegó nuevamente al local (33-22) con tres minutos por jugar. Y en el último minuto pasó de todo, ya que primero Boca metió un 6-0 para acercarse (33-28), pero los locales estamparon el mismo parcial y cerraron el segundo cuarto ganando 39-28.

El tercero se inició con una buena defensa y un preciso contragolpe para sacar 13 (41-28). Luego, la renta se estiró a 14 (46-32) con 7 y medio por jugar y los activos Austin y Vaulet. Además, la defensa siguió con consistencia. De todas maneras, Boca también se puso firme atrás y aprovechó una nueva laguna de Peñarol para acercarse 48-44 con el protagonismo de Rivero. Era un momento complicado, pero los "Milrayitas" lo sacaron adelante con la vuelta a las bases: una defensa aguerrida y el aporte de sus pibes en ataque. Monacchi y Valinotti dieron un buen descanso a los titulares y además apareció Arn para comandar un 12-2 tranquilizador que lo dejó adelante 60-46 al finalizar el período.

El último cuarto se abrió con dos triples de Monacchi para que Peñarol sacara 20 puntos de renta (69-49). Además, el pibe contagió con su defensa agresiva y recuperos. Y para coronar su gran rendimiento metió otro triple para alejar a los locales por 21 (75-54) con 3 minutos y medio por jugar. Fue el golpe de nocaut para un Boca que siguió intentando pero ya había quedado muy relegado en el juego y en el resultado. El final tranquilo fue para que jugaran los pibes de ambos equipos.