Revés para la Biblioteca Juventud Moderna: críticas a Mourelle y pedido de audiencia

La ordenanza que condonaba las deudas de la Biblioteca Popular Juventud Moderna en concepto de Tasa por Servicios Urbanos y de Contribución a la Salud Pública y el Desarrollo Infantil había sido aprobada por unanimidad tiempo atrás. En las últimas horas el intendente Arroyo decidió vetarla, amparado en una posición del oficialismo que quedó expuesta vía redes sociales a través del polémico secretario de Hacienda, Hernán Mourelle. 

Conocida la decisión del jefe comunal, el presidente de la biblioteca, Eduardo Bronzini, dialogó con el programa Mar del Plata PM de 0223 radio y reconoció que no se esperaba una noticia así. “Estamos sorprendidos” respondió el dirigente al ser consultado por el veto.

En esa línea, Bronzini puso el foco en lo expresado por Mourelle: “Primero que todo, lamentamos mucho los twets que salieron inmediatamente después del veto del intendente elevados en redes sociales por el secretario de Hacienda. Creo que muestra un desconocimiento de la ciudad y sobre todo de la historia de la Biblioteca Popular Juventud Moderna. Esos twets distorsionaron un montón de cosas”, reparó.

A continuación, el referente de la institución confirmó que ya se presentó en la municipalidad “para pedir audiencia con el intendente a fin de tratar de solucionar este tema antes de que se amplifique más con la presencia de todos en los medios. Esto nos obliga a tener que salir a hacer aclaraciones y eso lleva siempre a una amplificación del conflicto”, entendió.

Bronzini explicó que “las propiedades vinculadas a las cuentas de TSU que el Concejo condonaba, como ha hecho en otras ocasiones en otros períodos, son de la biblioteca desde el año 1920. No son locales ni propiedades que no pertenezcan a la biblioteca. Son la sede social y el viejo teatro Diagonal, hoy sala Teatriz” detalló en ese sentido.

Al rememorar el pasado reciente en la relación con la comuna, el dirigente socialista contó: “En el año 2013 se logró un convenio con la municipalidad, donde muchas de las actividades que organizaba la Secretaría de Cultura se hacían desde la biblioteca, desde nuestra sede social y en el marco del cual pasó a la órbita municipal el teatro Diagonal. En el 2016, a unos meses de asumir Arroyo, la actual gestión decidió rescindir el contrato, que estaba con deuda en ese momento. A partir de ahí tuvimos que buscar la manera de sostener todas las actividades que realiza la biblioteca, que son muchas y la mayoría de ellas gratuitas. Desde ese entonces pudimos sostenerla con una locación a un privado, que ha hecho una gran remodelación del teatro y es uno de los sostenimientos de la institución”, concluyó.