¡Insólito! Barras y jugadores de Racing de Olavarría se pelearon en la platea

Otra vez la violencia en el fútbol toma repercusión nacional y gana lugar en los medios de todo el país. Esta vez no fue una pelea entre hinchadas, no hubo agresión entre propios jugadores ni terminó sufriendo un árbitro. Insólitamente, los protagonistas en esta oportunidad fueron futbolistas e hinchas de un mismo club, los que terminaron a las piñas. Pasó en Racing de Olavarría, luego del empate ante Embajadores por el Torneo Regional Amateur.

Que el gol agónico de la visita haya exaltado los ánimos, es lógico. El "Chaira" es uno de los históricos del ascenso, el club más popular de Olavarría y se preparó para luchar un ascenso al Federal A. Y los resultados no han sido los mejores en este arranque de torneo. Sin embargo, lo que pasó excede las broncas y enojos normales de los hinchas. 

Barras de Racing cruzaron la cancha, invadieron la platea techada y amagaron a meterse al vestuario, pero se encontraron con los mismos jugadores que salieron a enfrentarlos. La situación descolocó a los delincuentes que empezaron a retroceder y cruzaron algunos golpes con los futbolistas que fueron ganando terreno y los hicieron retroceder. Cuando los barras se pararon, la situación se volvió todavía más tensa, porque había mucha gente en el sector y terminaban golpeando a cualquiera que no tenía nada que ver. 

Por suerte, entre dirigentes y allegados pudieron persuadir a los jugadores que se volvieron a meter para el vestuario, luego de demostrarles a los barras que ellos no les tenían miedo. Franco Janson (hermano de Lucas, jugador de Vélez) y Luciano Rojas, fueron los dos futbolistas más enojados por la situación y quiénes se enfrentaron a golpes con los hinchas.

La gente de Racing estaba enojada, pero no es forma de reaccionar. Y lo mostraron los propios hinchas comunes, esos que estaban en la platea y "defendieron" a los jugadores ante el intento de ataque y los despidieron con aplausos, avalando que no se hayan dejado llevar por delante por los barras, que se creen dueños de algo que no lo son.