Ratifican la negativa de "libertad condicional" a policías que violaron y mataron a Natalia Melmann

La Cámara de Apelaciones de Mar del Plata ratificó este martes el rechazo al pedido de libertad condicional que elevaron en julio del año pasado Oscar Echenique y Ricardo Anselmini, dos de los tres efectivos de la Policía Bonaerense que junto a Ricardo Suárez  fueron condenados a cadena perpetua en 2002 por torturar, violar y asesinar a Natalia Melmann en un descampado en Miramar.

Fuentes judiciales consultadas por 0223 confirmaron la resolución que está en sintonía con el dictamen que ya había emitido a mediados de diciembre el juez de Ejecución Penal, Ricardo Perdichizzi, que decidió no otorgar el beneficio a los homicidas y violadores. Si bien Suárez también lo solicitó, la notificación a la partes involucradas sobre esta segunda negativa solo alcanza, por el momento, a Echenique y Anselmini.

Los expolicías habían justificado el pedido a la Justicia por cumplir los 20 años en prisión. En el 2021, cuando la solicitud se conoció públicamente, la familia de Melmann no tardó en hacer oír su repudio. Es que si se le otorga la libertad condiciona a los femicidas, podrían salir seis años y siete meses antes de lo previsto.

No fue fue el único intento por obtener la libertad. En abril del 2020, la abogada Patricia Perelló, que representa legalmente a los condenados, había tramitado un pedido de "prisión domiciliaria" que también fue rechazado por las autoridades judiciales.

En 2002, el Tribunal Oral en lo Criminal 2 encontró culpables a los expolicías por los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada, abuso sexual agravado y homicidio triplemente calificado por ensañamiento, alevosía, en concurso con dos o más personas para procurar su impunidad”.

Entre septiembre y octubre de ese año, el Tribunal Oral en lo Criminal 2 de Mar del Plata comprobó que el 4 de febrero del 2001 Natalia fue “accedida carnalmente por vía vaginal, bucal y anal por varias personas", y luego, "con el inequívoco propósito de procurar la impunidad de la agresión sexual, la víctima fue muerta por asfixia, estrangulada con un lazo confeccionado con el cordón de una de sus zapatillas". Los efectivos de la Policía Bonaerense fueron condenados a reclusión perpetua, aunque después la defensa apeló esta condena y se la redujo a prisión perpetua.