Acorralado por los escándalos, renunció el primer ministro del Reino Unido

Boris Johnson renunció este jueves como primer ministro del Reino Unido, después de tres tumultuosos años en el cargo marcados por el Brexit, la pandemia y los crecientes escándalos, que en los últimos días terminó con la dimisión de unos 50 miembros de su Ejecutivo. Sin embargo, el ahora exlíder del Partido Conservador anticipó sus intenciones de permanecer en el cargo hasta que su partido elija a un sucesor, en septiembre u octubre.

El primer ministro había rechazado llamados a renunciar de integrantes de su propio gabinete luego de una serie de escándalos éticos. Pero al final decidió dar un paso al costado luego de la renuncia de unos 50 miembros de su Ejecutivo, incluyendo dos ministros.

La noticia se conoció luego de que Nadhim Zahawi, el ministro de Finanzas que Johnson había nombrado hace apenas dos días tras la dimisión de su antecesor, le pidiera que renunciara al cargo de premier. El funcionario, que hace apenas 36 horas había reemplazado al exministro Rishi Sunak, dijo que Johnson sabía que "lo correcto es irse ya".

La secretaria de Estado para Educación, Michelle Donelan, que también había sido nombrada tras la renuncia de su predecesor, anunció este jueves asimismo su dimisión.

El líder del opositor Partido Laborista, Keir Starmer, dijo que la perspectiva de una renuncia de Johnson era una "buena noticia". "Necesitamos un verdadero cambio de gobierno", agregó.

La avalancha de renuncias comenzó el martes con Sunak y el exministro de Salud Sajid Javid, que dimitieron con críticas al primer ministro por el manejo el manejo del líder conservador frente a los escándalos.

Varios referentes del Ejecutivo, entre ellos su hasta ahora incondicional defensora Priti Patel, ministra del Interior, fueron anoche a Downing Street, la residencia oficial del premier, a informarle que había perdido el apoyo de su Partido Conservador y que no puede continuar, pero la respuesta fue la destitución del ministro de Vivienda, Michael Gove.

Las renuncias comenzaron después de que el primer ministro negara estar al tanto de acusaciones de acoso sexual contra el diputado Chris Pincher, antes de nombrarlo como jefe adjunto en el Gabinete, en febrero pasado.