El comerciante del puerto murió de una crisis hipertensiva por evento traumático

Lastimaduras en las muñecas propias de las ataduras y escoriación cuando cayó de a silla donde estaba reducido. Esas son las heridas que se detectaron en la autopsia al cuerpo del comerciante de 71 años que murió por una crisis hipertensiva por evento traumático el sábado a la noche cuando lo asaltaron en su local de 12 de Octubre y Rondeau.

Más allá de la causa del deceso, la fiscalía mantiene la calificación de homicidio en ocasión de robo. “Muere por una crisis hipertensiva, pero eso no modifica que sea un homicidio en ocasión de robo. Lo mataron en el robo, el resultado muerte se impone igual”, dijeron allegados a la investigación a este medio.

Las fuentes consultadas por 0223 confirmaron que además de los surcos que se hallaron en las muñecas, producto de las ataduras, el cuerpo de Antonio Di Meglio también presentaba escoriaciones en el codo y en el rostro, pero compatibles con la caída.

Tal como se informó, el hecho ocurrió minutos antes de las 22 del sábado, cuando entre tres y cuatro  delincuentes abordaron a Di Meglio, que estaba cerrando su negocio y lo redujeron. Al no encontrar mucho dinero de la recaudación, subieron hasta la planta alta donde se encontraba su mujer, de 68 años. 

“Luego de atarlo con precintos, exigieron a los gritos a que les entreguen dólares. Cuando se dieron cuenta que el hombre estaba descompensado, huyeron del lugar”, informaron.

La víctima tenía antecedentes cardíacos y poseía al menos dos stents. El septuagenario era propietario del lugar y según sus allegados, "trabajó toda su vida en la verdulería".