Lula aseguró que el acuerdo Mercosur-UE se podría anunciar antes de la asunción de Milei

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró este martes que buscará aprobar antes del 7 de diciembre el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercosur, al revelar el contenido de una conversación mantenida con la titular de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

"Llamé ayer a Ursula von der Leyen para decirle que quiero cerrar el acuerdo de la UE-Mercosur bajo mi presidencia (rotativa del bloque)", que vence el 7 de diciembre, dijo Lula en el programa Conversación con el Presidente que emiten los medios públicos brasileños.

En ese marco, sostuvo que el anuncio puede ser realizado en Dubai entre el 30 de noviembre y el 3 de diciembre, durante su viaje a la Confederación sobre Cambio Climático de la ONU (COP-28) que se realizará en Emiratos Árabes Unidos. "Le hemos pasado a ella todos los puntos conflictivos de la negociación. Ella prometió intentar, en la COP28, hacer una reunión conmigo y presentar la respuesta de la UE sobre nuestra demanda", explicó Lula.

La presidencia brasileña del Mercosur será hasta el 7 de diciembre, tres días antes del recambio presidencial en Argentina, cuando asuma el presidente electo Javier Milei. "El gobierno brasileño ocupa la presidencia del Mercosur hasta el 7 de diciembre y ha discutido con la Unión Europea los puntos finales del acuerdo entre ambos bloques. El presidente Lula habló recientemente sobre el tema con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, quien ocupa la presidencia rotativa del bloque europeo", indicó un comunicado de la cancillería brasileña.

Lula será el anfitrión el 7 de diciembre en Río de Janeiro de la cumbre del Mercosur, en la cual pasará la presidencia rotativa del bloque a Paraguay. La UE y el Mercosur, que integran Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, intentan concretar un tratado de libre comercio luego de llegar a un acuerdo de principios en 2019, tras más de dos décadas de negociaciones.

En marzo, la UE presentó un instrumento adicional al Mercosur en el que incorporó una serie de exigencias medioambientales suplementarias que podrían perjudicar la exportación de determinados productos de la región, por lo que se encontró con la resistencia de algunos países. Este punto fue considerado por Lula como una "amenaza", pese a manifestar su intención de cerrar el pacto, al igual que el presidente Alberto Fernández.