Para la Fiscalía hubo legítima defensa: “Intentaron dispararle y temía que lo reconocieran como policía”

El fiscal Fernando Berlingeri detalló que la muerte de un delincuente a manos de una víctima que fue asaltada y tomada de rehén junto a su familia este luns por la mañana, es investigada como un caso de legítima defensa, por lo que no habrá medidas sobre la libertad de la persona.

En contacto con la prensa, Berlingeri especificó que según las primeras evidencias recogidas en la escena del crimen, los maleantes habrían ingresado a la vivienda de Alejandro Bonet al 600 cerca de las 7 de la mañana de este lunes tras forzar una pequeña ventana del sector trasero, la única que no cuenta con rejas.

Rápidamente y muñidos de dos revólveres calibre 22, redujeron a los habitantes de la vivienda, un policía federal retirado de 55 años, su esposa y la hija de 14 años. “En el medio de la situación los atan, encierran y amenazaban buscando dinero, en un momento el dueño, policía federal retirado, logra hacerse de su arma escondida y tienen un enfrentamiento”, prosiguió el fiscal.

Ante una repregunta, precisó que en rigor no habría habido un enfrentamiento, aunque “lo que nos manifiestan las víctimas del robo es que hubo un intento de disparar una de las armas, efectivamente tiene signos de haberse hecho el intento pero no tuvo éxito”. Es que según las primeras observaciones, una de las armas fue percutada aunque la bala nunca salió, si bien eso será sometido a las pericias de rigor.

Ese desenlace se dio en el momento en el que los asaltantes se preparaban para huir de la escena. “Hay un momento en que están todos atados y encerrados, (los delincuentes) se descuidan cuando empiezan a cargar los elementos en el auto de los residentes, el dueño de casa toma la decisión ante las permanentes amenazas de que los iban a matar y en un momento de distracción logra hacerse del arma y tener este final”, añadió Berlingeri.

El delincuente muerto recibió un disparo en la cabeza y cayó sin vida junto al auto, mientras que el otro fue alcanzado por cinco disparos, dos de ellos en el tórax, y por estas horas era intervenido quirúrgicamente en el Higa, donde se encuentra en grave estado.

En su relato de los hechos, el fiscal enfatizó que el accionar del padre de familia se dio tras las veladas amenazas de muerte y en medio “del temor de que lo reconocieran como policía, ya que tenía el uniforme en la vivienda”. En medio de la requisa en busca de objetos de valor, los maleantes hallaron balas 9 mm, aunque no así el arma ni el uniforme que aún conserva el propietario, lo que podría haber desatado un final trágico para las víctimas.

Con los elementos actuales, se baraja tanto la hipótesis que se trató de un robo al voleo como que los delincuentes podrían haber contado con un dato erróneo sobre un importante botín. “Querían los dólares, al hombre lo golpearon, hay rastro de sangre en uno de los revólveres”, afirmó Berlingeri, motivo por el cual la víctima fue derivada al Higa, aunque sin correr peligro. “Me dicen que no tienen nada, fue un dato erróneo, tenían 4 o 5 dólares que los encontramos entre las pertenencias del fallecido”, agregó como dato.

Finalmente, el fiscal informó que se formaron dos causas, una por el robo y otra por la muerte del delincuente. La primera fue caratulada como robo agravado por el uso de arma de fuego, mientras que la segunda como homicidio agravado por el uso de arma de fuego en el contexto de legítima defensa. “No tome ninguna determinación sobre la libertad” del policía retirado, aclaró Berlingeri.