El 30 por ciento de los homicidios del año está sin esclarecer

El asesinato a balazos de Fabián Vallina Ortiz (33) elevó a 19 la cantidad de hechos registrados en lo que va del año e igualó la marca que a la misma fecha se había registrado durante 2023. Al analizar cada hecho, el dato saliente es que el treinta por ciento no registra personas aprehendidas ni imputadas hasta el momento.

La investigación por el crimen de Vallina Ortiz, un hombre que registraba varios procesos penales previos, está hoy en un punto medio: la presencia de menores en el grupo armado que ingresó a la casa ubicada en Las Higueras al 2900 hizo que el fiscal Leandro Arévalo remitiera el expediente a la fiscal Mariana Baqueiro del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil.

La fiscal ya recibió el informe preliminar de autopsia que elaboró la Policía Científica y está a la espera del reporte de balística para confirmar que las siete vainas de calibre nueve milímetros que se hallaron en el lugar corresponden a un solo arma.

Una de las dificultades con la que se chocará será establecer fehacientemente el autor de los disparos ya que fueron varias las personas que ingresaron a la vivienda.

Tampoco hay pistas firmes en los otros dos homicidios registrados en lo que va de junio en Batán y en el barrio Félix U. Camet. El primero de ellos es el de Gustavo Singhler (32) en su casa de Bañuelos al 10.800 durante un robo que cometieron varias personas que lo apuñalaron y escaparon con el dinero que tenía guardado.

Misma situación tiene el expediente que investiga el crimen de Hector Vila (77) -en su casa de Cerro Hermoso e Isla de los Estados- tras sufrir unos sesenta cortes en su cuerpo y un fuerte golpe con un objeto contundente en su cabeza. Si bien se hicieron un par de allanamientos en el barrio, por el momento el fiscal Alejandro Pelegrinelli no imputó a ninguna persona.

Los otros tres, en marzo

La aparición de un cuerpo en la losa de una vivienda en el barrio San Martín que tuvo lugar el 5 de marzo también quedó en la órbita de trabajo de la Unidad Funcional de Instrucción N°6 y más allá de las pesquisas que realizó personal de la DDI, no se avanzó en la identificación del autor del homicidio.

Sergio Leguizamón tenía 27 años, registraba varios antecedentes penales –que permitieron su identificación a través del sistema AFIS- y murió de un solo disparo en la cabeza. Las pericias indican que le dispararon desde abajo cuando estaba en el techo de una propiedad ubicada en Mateotti entre Calabria y Gutenberg.

David Rogelio Díaz (36) murió el 12 marzo pasado en el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa) donde estaba internado tras ser atacado a golpes el 25 de febrero en Juramento y Ortiz de Zárate. Sus familiares sostuvieron desde un primer momento que fue producto de una patota que lo sorprendió a diez cuadras de su casa.

El tercer homicidio doloso que no tuvo avances en su esclarecimiento ese mes ocurrió el día 25 cuando hallaron el cadáver de Pablo Daniel Sosa Motti (28) con dos heridas de arma de fuego en un zanjón del barrio Don Emilio. 

La existencia de antecedentes penales por distintos delitos permitió identificar los restos hallados en la zona de Canesa entre Vértiz y Azopardo. Un hermano de la víctima confirmó que Sosa Motti estaba en situación de calle y los pocos vecinos de la zona no aportaron elemento alguno que permita esclarecer el hecho por el momento.