El comerciante asesinado recibió un solo balazo de calibre chico

El informe preliminar de autopsia que la fiscal Florencia Salas recibió hace minutos en su despacho confirmó que el comerciante asesinado el jueves a la noche en su negocio sobre la avenida Fortunato de la Plaza recibió un solo disparo que ingresó por el abdomen, le perforó el riñón, provocó una importante pérdida de sangre y un shock hipovolémico que derivó en su muerte.

El reporte confirmó, a partir del plomo rescatado, que el disparo que mató a Carlos Enrique Rodríguez fue efectuado con un arma de calibre chico, un calibre .22 o .22 largo. El reporte confirmó al menos otra lesión la víctima que se detallará en el escrito final ya que no es la que le ocasionó la muerte.

Tal como adelantó 0223, las primeras actuaciones que se hicieron el jueves por la noche estuvieron a cargo del fiscal Fernando Berlingeri, que se hizo presente en el lugar tras el aviso que recibió la policía tanto por los operadores del Centro de Operación y Monitoreo como por varios llamados al 911 de los vecinos. Sin embargo, tras confirmar el deceso de Rodríguez, el expediente fue girado a la Unidad Funcional de Instrucción N°1 que está de turno hasta el domingo.

La fiscal afirmó que la escena fue captada por las cámaras del COM, donde se pudo ver como dos hombres salieron del almacén y se llevaban una balanza y un parlante. Los primeros datos indican que huyeron a pie y se habrían ocultado en inmediaciones de la zona.

El hombre de 61 años vivía solo en esa construcción en la que funcionaba la despensa y las autoridades judiciales ya pudieron contactar a familiares que también viven en Mar del Plata.

El de Rodríguez es el vigésimo homicidio doloso del año, el cuarto que ocurre durante junio y el primero que se registra en jurisdicción de la comisaría decimosexta.