“Reverenda conch…”: sancionan a un médico municipal por insultar y maltratar a una mujer policía

Un maltrato mediado por insultos denigrantes contra una mujer policía le valió una suspensión a un médico municipal que se desempeña en un Centro de Atención Primaria de la Salud (Caps), tras una extensa investigación sumarial en donde el intendente Guillermo Montenegro también ordenó que el agente realice una capacitación en el marco de la Ley Micaela.

El episodio ocurrió hace tiempo, más precisamente entre la noche del 7 de mayo de 2023 y la madrugada del día siguiente en el Caps N°2 del Puerto, aunque la conclusión del sumario administrativo recién se oficializó en las últimas horas a través de un decreto. Allí, Montenegro impuso una sanción de 20 días contra un médico por violencia de género y maltrato contra una sargento que en ese entonces se desempeñaba en el centro sanitario ubicado en la calle 12 de Octubre al 4.400.

Según se corroboró en la investigación a través de diversos testimonios, el hecho se desató la noche del 7 de mayo, cuando una joven se presentó con un cuadro respiratorio y se le prescribió una receta tras ser observada por el profesional médico. La atención pareció no satisfacer a la paciente, quien cuando salió al pasillo le dijo a su madre: “si no hubiera venido a la consulta era lo mismo”. Esa frase fue oída por el médico, que salió tras ella y le reclamó que le devuelva la receta que le había hecho.

La joven se negó al pedido, por lo que el médico le ordenó a una efectivo policial que se la retire por la fuerza, lo que fue rechazado por la sargento ya que no está autorizada para realizar ese tipo de cacheo. La negativa fue respondida por el doctor con un maltrato verbal, aunque sin insultos. Igualmente, la policía denunció la situación a sus superiores, que se presentaron en el Caps para hablar con el médico.

Cuando todo parecía quedar en un entredicho, se precipitó cuando, horas más tarde, ya en la madrugada del 8 de mayo, el médico implicado relató la situación a otra empleada del Caps, refiriéndose a la policía, que escuchó todo, “de un modo inadecuado y recurriendo a improperios varios”, según consta en el sumario.

“Hizo venir a los jefes para cagarme a pedos”, se quejó el médico, ante lo cual la policía lo cruzó y le espetó que se lo diga en la cara. Allí el profesional cruzó todos los límites: “sí, te lo digo, reverenda conch…, sos un reverenda conch…”, reveló el sumario. Ello generó un nuevo aviso a los superiores, lo que incluso concluyó en una denuncia policial contra el médico, lo que disparó el sumario a nivel municipal.

Ahora, más de un año y medio después, la Dirección de Sumarios determinó que “la conducta desplegada por el agente ha sido lisa y llanamente en contra de los deberes y obligaciones que la normativa legal le impone en función de ser un agente municipal”. Si bien recomendó 30 días de suspensión, finalmente se le aplicarán 20.

Además, el área indicó y Montenegro decretó que el médico también deba realizar una capacitación de la Ley Micaela en temática de género y violencia contra las mujeres.