Universitarios analizan medidas de fuerza aunque descartan las tomas: "Estamos complicados"

Mientras los estudiantes siguen apostando por la Universidad Nacional de Mar del Plata (que este año tuvo más de 26 mil inscripciones), el inicio de clases sigue en suspenso en un año que promete ser convulsionado.

El 2024 atravesó al sector con grandes movilizaciones por la educación pública y tomas de facultades por parte del estudiantado que se posicionó contra los recortes y el desfinanciamiento. Sin embargo, este año no ha cambiado el panorama pero sí las posibles protestas.

Este miércoles habrá una importante reunión entre los diferentes actores de la vida universitaria en Mar del Plata, con un encuentro del Comité Ejecutivo del Consejo Interuniversitario Nacional y diálogo entre el Rectorado, los gremios, los docentes y los estudiantes. Entre todos, buscarán plantear un panorama de situación y analizar los posibles caminos a seguir.

"No estamos en la situación que tenemos ganas de estar y las expectativas con respecto a este año son bajas. Estamos con un presupuesto reconducido, que es una prórroga de la prórroga. Seguimos esperando partidas discrecionales del Gobierno Nacional, a pesar de que ya sabemos su postura hacia las universidades públicas por lo que no sabemos qué va a pasar con eso", aseguró a 0223 Rosella Pasetti, presidenta de la Federación Universitaria Marplatense (FUM).

A pocos días del paro de Adum y APU (previstos para lunes 17 y martes 18 de marzo), los estudiantes aseguraron que si bien acompañan el reclamo, buscan abrir el debate sobre el tenor de las medidas de fuerza. "Creemos que tienen que ir acompañadas del dictado de clases, porque todos hacemos un esfuerzo para sostener nuestro día a día. Es un contexto complicado, en el que nos cuesta mucho venir a estudiar y consideramos que lo importante es estar en las aulas", remarcó.

Seguir pensando herramientas para reclamar es el nuevo desafío de la conducción, que enfrenta además una postura de la sociedad a la que hay que demostrarle que la universidad pública tiene un enorme valor.

"Tenemos que reinventar las protestas y quizás podamos aunar así más voluntades. Si bien con las tomas del año pasado se lograron muchas mejoras en las aulas, es importante que la gente vea lo que hacemos y no se siga poniendo en jaque a la educación. Tenemos que reunirnos, juntarnos, hablar y ver qué es lo mejor que podemos hacer", subrayó Pasetti.

Una semana clave

Quien también ha tomado protagonismo en los últimos días fue el rector Alfredo Lazzeretti, quien salió públicamente a cuestionar la falta de presupuesto para las universidades. En ese marco, confió que la situación es "por demás compleja": "Hay un clima de malestar; tanto los docentes como los trabajadores en general hemos sufrido un gran retraso salarial durante 2024 y en lo que va de este año seguimos perdiendo porque los magros aumentos van muy por debajo de la inflación. De no revertirse esa situación, vamos a tener un año plagado de conflictos", aseguró.

El punto de quiebre para él viene de la falta de revisión del Gobierno nacional ante los planteos que se realizan. "Estamos muy preocupados por la situación. En estos momentos se está tratando de poner en marcha el ciclo lectivo pero los trabajadores tienen sus inconvenientes y las conducciones de los centros de estudiantes también están muy activas porque muchos de sus reclamos tampoco son escuchados. Las becas están recortadas, los comedores universitarios tienen un crecimiento de estudiantes y las partidas se ven más restringidas", aseveró.

Esta semana se reunirán los rectores de todas las universidades y pondrán en común las problemáticas que atraviesan; será un momento de definiciones importantes. "Vamos a juntarnos y ver cómo hacemos escuchar el reclamo que tenemos", adelantó Lazzeretti.