En 17 barrios de Mar del Plata, el 45% de los chicos sufre malnutrición

Desde el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci) y la organización Investigación Para una Nueva Buenos Aires (Innoba) se plantearon un desafío: realizar el primer Indicador Barrial de Situación Nutricional (Ibsn) en General Pueyrredon. Una vez concretado, llegaron a una cifra triste e impactante: el 45% de los chicos relevados tiene malnutrición.

El informe, presentado este miércoles en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Mar del Plata, se efectuó durante los meses de septiembre y octubre de este año sobre merenderos y comedores de 17 barrios del distrito: trece de Mar del Plata y los cuatro restantes de Batán.

Rodrigo Blanco, director del Isepci, dialogó con 0223 y confirmó que la iniciativa “surgió como una investigación y acción participativa orientada a construir datos epidemiológicos de base”. “Hicimos un relevamiento sobre 503 chicos, divididos en 4 grupos etarios: lactantes de 0 a 2 años, primera infancia de 2 a 6 años, segunda infancia de 6 a 12 y adolescencia de 12 a 19 años en el que relevamos la relación de peso y talla con la edad”, especificó de movida el dirigente.

En esa línea, detalló: “En líneas generales, detectamos un 45% de malnutrición según cuatro indicadores: bajo peso, riesgo de caer en bajo peso, sobre peso y obesidad. La tendencia se da en todos los barrios, aunque hay diferencias, no queremos estigmatizar a ninguna jurisdicción”, aclaró.

Uno de los datos más relevantes adelantados por Blanco refiere a lo que sucede entre los niños de 2 a 6 años, catalogados en la denominada primera infancia: “El 50%, es decir, 1 de cada 2 chicos, están con malnutrición”, sentenció.

“Comprobamos también que en el período de lactancia, de 0 a 2 años, hay problemas de baja talla, y eso significa que la malnutrición es crónica, significa que hay un proceso de mala alimentación que se extiende por mucho tiempo, que tiene que ver principalmente con las familias carenciadas en las que viven”, describió.

“El muestreo que hicimos no es aleatorio, queremos poner la luz en la situación de vulnerabilidad, por eso fuimos a recabar datos en los comedores escolares, donde se puso en evidencia que la malnutrición no se da sólo en los hogares”, sumó Blanco.

En la previa de la difusión total del relevamiento y consultado por la continuidad de estos indicadores a futuro, el director del Isepci avisó: “Lo haremos de manera semestral, para que esta herramienta permita realizar una detección precoz de malnutrición”, concluyó.