No nos forreen más 

Sincérense y digan que no les importa nuestros derechos. Que nos les importamos nosotros. Que preferirían meternos a todos en una gran "cárcel-guardería" y largarnos, muy de a poco ... siempre y cuando estemos suficientemente adaptados al Sistema ... siempre y cuando no les jodamos en sus calles y en sus plazas.
Sincérense y digan que les gustaría que no levantemos la mano ni para pedir ir al baño

Que aceptemos su información sin más, que la duda y la crítica no estorben sus clases. Aprovechen y atrévanse a decir que el mundo es más inseguro por nosotros, por nuestras gorras y porque fumamos y porque reímos. Sí, somos muchos más peligrosos que esos desalmados a los que votás, a los que nos ponés como ejemplo, aunque no los querramos.

Es verdad que te duele más ver un animalito abandonado que un pibe comiendo de la basura. Que sos capaz de llevarte un perro a tu casa, pero ni en pedo te acercás a nosotros, por miedo o por desconfianza.

Está bien que no te metas si un adulto le pega a uno de los nuestros: "algo habrá hecho" y, de última, que se ocupen sus padres (ah ¿son sus padres? bueno, ellos sabrán… )
Tocame el culo, total a mí no me van a creer. Empastillame todo lo que puedas para todos los trastornos. Si me ves babeando es buena señal.

Mandame a laburar, así sé lo que es la vida. Esta vida de mierda, pero que es la que nos tocó. La que debemos aceptar porque “pobres hubo siempre”. 

Y vos también: rezá por mí. Rezá y limpiá tus culpas, pero no te sientas culpable. No sos vos. Soy yo que no sé en qué o quién creer. Y vos … que decirte a vos que de vez en cuando te acercás con lo único que tenés a mano: tus manos … No nos dejen en manos de los insensibles. Explicales que gritamos como podemos. Que somos lo que crearon y lo que esperan que hagamos. Que lo mismo que detestan es lo quieren reproducir en nosotros. 

Pero también deciles que hay un futuro mejor para todos, pero que comiencen ya por nuestro presente ... porque muchos no sabemos si llegamos. Que si quieren seguridad, nos den a nosotros ya la seguridad de crecer, de jugar y de aprender. Que si quieren un mundo más sano, no lo van a lograr transmitiéndonos sus adicciones y su sin-sentido. Que tengan fe y bondad en nosotros. Que empiecen por sentirnos como hijos suyos. Que ablanden sus corazones, porque no somos peligrosos. Estamos en peligro.

No sé si pedirte más de lo que hacés. No sé si puedo pedirte algo. Pero nunca te olvides que si vos no estás, muchos no existimos.

Bueno, sí: déjame pedirte algo: no les creas. Creénos a nosotros.

En unos días se encuentran a celebrar no sé qué cosa de la Convención de los derechos de los niños. Yo no creo que vaya, sabrás entender por qué… estoy bastante complicado. Pero sabelo: a muchos, la única esperanza que nos queda son ustedes.