Por la crisis y el tarifazo, advierten que peligra el trabajo de delivery
Desde el gremio de motoristas y mensajeros Sicamm estiman que cerraron unos 15 comercios gastronómicos en los últimos meses en la zona centro mientras que otros reducen horas o despiden “sin justificación”.
Por Redacción 0223
PARA 0223
Desde el Sindicato de Cadetes, Motoristas y Mensajeros (Sicamm) manifestaron su preocupación por el cierre de numerosos comercios gastronómicos en Mar del Plata por la crisis y el tarifazo y que esto sumado a la precariedad laboral de los delivery “afecta de gran manera a los trabajadores”.
“La crisis se está notando en Mar del Plata y sino dense una vuelta por el centro para ver la cantidad de casas de comida que han cerrado. Algunas grandes como el café Reggio, que cerró sus puertas hace un par de semanas. Y esto pega directamente a nuestra fuente laboral”, afirmó Christian Grobas, secretario general del Sicamm, en diálogo con 0223.
El dirigente que representa a cadetes y mensajeros que trabajan arriba de una moto, estimó que “entre 10 y 15 locales gastronómicos cerraron luego de terminada la temporada y si la situación económica del país continúa así, más van a hacer lo mismo. Por lo pronto, las pequeñas pymes reducen la hora de los trabajadores de delivery mientras que los grandes precarizan más aún la actividad”.
Al respecto, citó el caso de la confitería “New Bar” como un “caso emblemático” en relación a denuncias por “trabajo precarizado”.
“La empresa New Bar es una cafetería linda por fuera, pero adentro despide a los trabajadores sin justificación”, remarcó Grobas, que recordó que “en el último año despidió a cinco trabajadores, uno de ellos después de regresar de una licencia por enfermedad. Lo suspendió y luego lo echó”.
Por este tipo de denuncias, desde el Sicamm trasladaron esta preocupación a los concejales del Frente para la Victoria y del Frente Renovador, “para impulsar alguna ordenanza que nos ayude a regular esta actividad, que ocupa unos 800 trabajadores en Mar del Plata -sin contar la temporada-, de los cuales el 90% debe usar su propia moto y que sólo el 50% está en blanco”, concluyó Grobas.
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