Suspendieron las salidas transitorias al asesino de Franco Castro

Apenas un mes después de su otorgamiento, la Cámara de Apelaciones y Garantías revocó las salidas transitorias de José Maximiliano Corredera Legato, el hombre que hace 14 años mató al adolescente Franco Castro López de un balazo en el cuello. La medida ya se hizo efectiva tras la comunicación cursada al complejo penitenciario de Batán.

Los jueces Adrián Angulo y Pablo Poggetto revocaron la medida del Juzgado de Ejecución Penal N°2 del pasado 20 de marzo que no hizo lugar a la solicitud fiscal respecto al "efecto suspensivo del recurso interpuesto en autos y disponer el cese inmediato del régimen de salidas transitorias".

Corredera Legato había sido incluído por primera vez en el regimen de salidas transitorias el 6 de junio de 2022 y fue revocada el 1 de julio del mismo año. La apelación no fue admitida por el Tribunal de Casación Penal y a la fecha se encuentra pendiente de resolución la queja interpuesta ante la Suprema Corte bonaerense.

En la resolución de la Cámara a la que tuvo acceso 0223 se consideró que la decisión de manener las salidas transitorias resultaba arbitraria y que no se había dado explicación alguna para disponer la ejecución de la misma.

La decisión de la Sala III fue de aplicación inmediata, ya se comunicó a las autoridades del Servicio Penitenciario Bonaerense y será apelada por la defensa de Ejecución Penal.

Un crimen que conmocionó a Mar del Plata

En la madrugada del domingo 14 de marzo de 2010, Franco Castro López se dirigía con seis amigos hacia la Plaza del Agua para participar de los festejos por San Patricio. Sin embargo, a pocas cuadras de casa, en Alvear y Vieytes, Corredera Legato se cruzó en el camino, drogado y a bordo de un Ford Fiesta que conducía su amigo Juan Manuel Riveros, y le dio un disparo mortal al cuello con una pistola 9 milímetros.

Aunque no tenía nada que ver, Corredera Legato se había convencido que Franco había agredido a su novia, quien, en verdad, había protagonizado antes una discusión con el propio Corredera Legato en su domicilio ubicado en Alvear al 4500. Entonces, en ese momento, se bajó del auto, le colocó el arma en el maxilar inferior al adolescente y le disparó a matar. Después, escapó y se mantuvo prófugo durante cuarenta y ocho horas. Riveros, en tanto, se entregó días más tarde en la subcomisaría Casino.

El crimen generó gran conmoción en la ciudad y derivó en una serie de marchas encabezadas por familiares y amigos en busca de Justicia. En diciembre de 2011, los jueces Néstor Conti, Gustavo Fissore y Jorge Peralta condenaron a Corredera Legato a 24 años de prisión por ser autor penalmente responsable del delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” mientras que a Riveros lo sentenciaron a 11 años de cárcel. El vencimiento de la pena opera hasta el 15 de marzo de 2034.